Por Alejandro Alberto Paulino Vallejo

La imagen del Magistrado Procurador Adjunto Hotoniel Bonilla quien es a la vez el Director de la Dirección Nacional de Persecución de la Corrupción Administrativa (DPCA) dando declaraciones de que en el país se ha desfalcado una cantidad aproximada de RD$104,000,000,000 de pesos o lo que es igual US$2,833,787,465.94 de dólares no debe de verse en forma alguna desligada con el auge que esta alcanzando la delincuencia y el crimen organizado.



La influencia de la corrupción gubernamental sobre la delincuencia hay que analizarla en tres renglones: la logística, la permisividad, y el aspecto psicológico. Al mencionar la logística nos estamos refiriendo a los instrumentos de trabajo asignados a los organismos públicos llamados a combatir la delincuencia, entiéndase el Ministerio Publico, Policía Nacional, Dirección Nacional de Control de Drogas y el Ministerio de Interior y Policía.

Diversas inversiones, prestamos e impuestos se han establecido para darle el apoyo logístico a las instituciones mencionadas previamente, pero los mismos en vez de ser encaminados a lograr dicho objetivo, se conviertan en otra forma más de desfalcar el estado dominicano, y enriquecer a un puñado de corruptos a los cuales no les importa la forma avasallante en que la delincuencia y el crimen organizado arropan a nuestra sociedad, como ejemplo de esto lo es el caso de la Sun Land.



Las motocicletas compradas para la Policía Nacional ya no se ven ni en los centros espiritistas, el préstamo se hizo para beneficiar a una empresa, no a la población aquejada por la delincuencia, y los policías por el mal salario que reciben, quienes ya sea a fuerza de amenazas y atentados o de ofertas económicas tentadoras, se tienen que involucrar directa e indirectamente en hechos delictivos. Si el Estado Dominicano tuviera un real interés en combatir la delincuencia, debería de empezar por acabar con la Corrupción relacionada con la inversión estatal en seguridad pública.

Otro factor que sustenta el crecimiento de la delincuencia y el crimen organizado lo constituye la permisividad. Este factor se hace sentir cuando la Policía Nacional detiene a un supuesto delincuente y luego el mismo para salir de prisión soborna a dicho policía, o a miembros del Ministerio Publico y en muchos casos a Jueces del Poder Judicial.

Como es posible que en nuestros barrios populares hayan muchos microtráficos de droga, así como Capos de la Droga y que las autoridades nunca sean capaces de culminar las investigaciones y lograr apresarlos acabando con la empresa criminal de estos, los cuales se pasean a la vista de todo el mundo sin preocupación alguna.

Y en los escasos casos en que son investigados las autoridades son lentas para detenerlos y los jueces hasta se asustan y son renuentes a juzgar a acusados de violar la Ley No. 50-88, lo que incrementa la delincuencia y pone en riesgo la seguridad de nosotros los ciudadanos, todo para que el corrupto día a día llene sus bolsillos de dinero.

El ultimo factor es el aspecto psicológico y en este inciden negativamente la falta de educación y la eliminación de la Moral y Cívica de las escuelas porque a los corruptos no les conviene un pueblo educado que luche por sus derechos. Esto permite que en la mayoría de nuestra población principalmente en la juventud se produzca una inversión de valores en la cual ya no son las personas probas los ejemplos a seguir sino los criminales, los que todo lo adquieren por su gran poder económico producto de sus actividades criminales las cuales ahora son hazañas para nuestra juventud y las cuales serán imitadas para poder alcanzar todos los ahora envidiados privilegios económicos de los que gozan los delincuentes y criminales organizados, gracias a la ambición del corrupto el cual les permite llevar a cabo sus empresas criminales con libertad para tener el también de ese dinero fácil.

El corrupto es el culpable de la perdida de nuestra juventud la cual al recurrir a la criminalidad para imitar el ejemplo del criminal de cuello blanco que ahora ve como su héroe llega al punto de no poder regenerarse como bien lo aseguran varios especialistas, perdiéndose los afectados para siempre. Nosotros como ciudadanos con nuestra actitud pasiva al tolerar al corrupto sin repudio alguno a través de nuestra historia, hemos permitido la creación de una sociedad corrompida donde impera el mensaje de que la ley está para violarse, la delincuencia e inmoralidad seguirán en aumento como también la crisis económica aumenta por la Corrupción, no hay oportunidades laborales para nadie, el Estado no desea invertir en la Educación y prefieren mejor dilapidar dicho presupuesto en otra cosa innecesaria, la delincuencia seguirá su avance y conquistan nuestro territorio y las autoridades ya no podrán controlarla.

Tan solo con una pequeñísima parte de los RD$104,000,000,000 de pesos que han desfalcado los corruptos, ósea 5,920,000,000 de pesos, lo que equivale a 160,000,000 de dólares norteamericanos, que es la partida asignada en el proyecto de ley de Presupuesto y Gastos Públicos para la tecnificación y modernización de la Policía Nacional, suma de dinero que ahora será recaudada con un préstamo, habríamos tenido autoridades y policías bien pagados, educados, con instrumentos de trabajo suficiente para ejercer sus labores y con la suficiente ética para servir a los contribuyentes.

En estas circunstancias será fácil tener delincuencia, droga, muertes, etc., pero para eliminar esto es necesario que tomemos conciencia que nuestro real enemigo es el corrupto, quien impide nuestro progreso robándose nuestro dinero razones por las cuales hay que acabar con el.