Varios acróbatas sorprendieron la semana pasada  al público cuando al dirigirse al trono papal para realizar un espectáculo frente a Benedicto XVI se despojaron de sus camisas.



Los artistas llevaban trajes blandos y cuando se dirigían hacia el trono papal, sorprendieron al público al quitarse la camisa para ejecutar un acto.

El Papa observó cómo los hombres se lanzaban al aire, uno sobre otro y realizaban sus acrobacias.

Unas monjas presentes en la audiencia aplaudieron con entusiasmo, mientras que la respuesta del Pontífice fue más mesurada.

Fuente: www2.esmas.com