1. Tronar los dedos



¿Cuántos de ustedes acostumbran a tronarse los dedos? Ya saben, cuando los doblas demasiado hasta que alcanzas a escuchar un crujido. Tal vez crees que estás descansando, pero lo único que estás haciendo es romper burbujas de nitrógeno creadas en las articulaciones.

2. Flatulencias



Las personas se «ventosean» una vez cada hora, así que un adulto puede expulsar hasta dos litros de gases. El 99 por ciento de estos no tienen olor, pero algunas veces el sulfuro que contienen algunos alimentos (cebolla, ajo, productos lácteos) hacen que esos gases huelan muy mal. Y si, además, liberas esos gases con ruidos muy fuertes, puede ser señal de intolerancia a la lactosa o de cálculos biliares.

3. Chasquido de mandíbula

Trastorno de la articulación temporomandibular, se le conoce a ese sonido que se produce cuando estás masticando y sin querer tu mandíbula suena una y otra vez.

4. Silbido al respirar

Aunque parezca lo contrario, este sonido puede significar buena
salud. Indica que las membranas de la nariz están haciendo bien su trabajo al capturar la suciedad. Esto, a diferencia de si la mucosidad es amarillo o verde que te indican que seguramente tienes una infección.

5. Estornudos

Los estornudos sirven para despejar las vías nasales. El aparato respiratorio genera expulsiones violentas de aire comprimido que viaja hasta 160 kilómetros por hora, que viene acompañado de saliva (1 litro expulsamos por día). El problema con los estornudos es que puedes hacerlo tan fuerte que te puede causar un esguince o hasta la muerte con un paro cardíaco. Ya hay casos registrados.

6. Ruido en los oídos

Es ese silbido que sólo tú puedes escuchar, es un trastorno que puede incluso llegar a intervenir en la vida diaria de una persona cuando el tintineo es exagerado. Puede ser síntoma de que tienes exceso de cerilla, algún cuerpo extraño alojado ahí o una infección en el oído.

7. Roncar

El 50 por ciento de las personas adultas ronca en alguna ocasión, mientras que el 25 por ciento de ellos son roncadores habituales. Aunque los hombres roncan más que las mujeres. Los ronquidos son una señal de que comemos demasiado, el sobrepeso aumenta los ronquidos; de que bebemos mucho o tenemos apnea.

8. Hipo

Cuando los nervios que controlan el diafragma son estimulados, se activan, provocando lo que conocemos como hipo. Una sensación y ruido que puede llegar a incomodar, pero que generalmente pasa rápido.

Sin embargo, se han documentado casos de personas a las que el hipo les ha durado hasta años. Cuando esto se convierte en algo malo es porque puede ser síndrome de un tumor en el esófago o de que bebemos demasiado.

9. Borborigmos

¿Qué es eso? Los ruidos que hace nuestro estómago e intestinos. Ruidos que en realidad son signo de buena salud, son contracciones que empujan los alimentos a través del estómago, lo que quiere decir que nuestro aparato digestivo está funcionando correctamente. Este ruido se escucha más cuando tenemos hambre porque el aparato digestivo no tiene comida.

10. Eructos

Los eructos son necesarios para el cuerpo humano, porque si no pudiéramos liberar gases a través de estos, las paredes de los intestinos se dilatarían y podrían terminar perforados.

Asimismo, el exceso de estos puede indicar que tenemos algún tipo de trastorno como una úlcera o una hernia, aunque también puede ser señal de que hemos tomado bebidas carbonatadas (refresco) o hemos comido muy deprisa.

Fuente: Elnuevodia.com