Tras varios meses afirmando que el país estaba “blindado” contra el cólera y exhibir con orgullo el reconocimiento de personalidades extranjeras por este “blindaje”, el ministro de Salud Pública habla ahora con tono desesperado sobre la necesidad urgente de que la población “se empodere” en la lucha contra la enfermedad.



Hasta el mediodía de este miércoles, treinta y ocho nuevos casos sospechosos de cólera aumentaron la lista de las decenas que fluyen a los hospitales, y particularmente al Luis Eduardo Aybar, en la capital, desde que los moradores de La Ciénaga dieran la voz de alarma, solo para verse acusados de alarmistas y desmentidos.

La realidad le ha dado en la cara a las autoridades, a quienes el Colegio Médico acusa de propiciar la expansión de la enfermedad a la que asiste la población por haberse dormido en sus laureles y, además, por haber subregistrado los casos para minimizar el impacto de la epidemia que, en Haití, donde se originó en la isla, ha provocado más de cinco mil muertos desde octubre de 2010.



En una declaración emitida hoy, Bautista Rojas Gómez informa que hasta mediodía habían ingresado al Luis Eduardo Aybar, catorce adultos y nueve niños; en Francisco Moscoso Puello, siete adultos y en el infantil Santo Socorro, seis niños.

Afirma ahora el funcionario que no basta con las labores de saneamiento que se lleva a cabo en los barrios capitalinos, en Santo Domingo, Santiago, San Juan de la Maguana y San Pedro de Macorís, sino que urge el “empoderamiento de los habitantes en el cumplimiento de las medidas de higiene”.

Mientras, añade, el personal del ministerio busca casos de personas con diarrea y otros síntomas del cólera “hasta donde no hay”, en un intento de atajar la epidemia en el Distrito y otras provincias, en cuyos barrios marginales se ha intensificado la vigilancia.

Fuente:7Dias.com.do