Las bebidas energéticas pueden ser peligrosas para los niños y adolescentes, según un reporte presentado en los Estados Unidos por pediatras que sostiene que no se deberían consumir estos productos pese a su popularidad. Entre los posibles daños, causados especialmente por el exceso de cafeína e ingredientes similares, hay palpitaciones, convulsiones, derrames cerebrales e incluso posibilidades de muerte repentina, escribieron los autores del reporte para la gaceta médica Pediatrics.



Los médicos revisaron información oficial y de grupos de interés, publicaciones científicas, reportes de caso y artículos en medios de comunicación.

Entre los datos recolectados por los especialistas que armaron el estudio, se encuentra el de un joven de 18 años de Missouri. El chico sufrió una convulsión y fue hospitalizado cinco días el año pasado tras ingerir dos bebidas energéticas grandes de una marca que nunca había probado. Su médico cree que la cafeína o ingredientes similares pudieron habérselo causado.



Según el reporte, algunas de estas bebidas contienen de cuatro a cinco veces la cantidad de cafeína que un refresco y son varios los chicos que beben cuatro o cinco de ellas al día.

Los autores del reporte pidieron que los pediatras le pregunten regularmente a sus pacientes y a sus padres sobre el posible uso de bebidas energéticas para advertirles de sus riesgos y recomendar que dejen de usarlas.

“Desalentamos el uso rutinario” en niños y adolescentes, dijo el médico Steven Lipshultz, jefe de pediatría en la Facultad de Medicina de la Universidad de Miami, quien escribió el reporte junto con otros colegas del centro.

Según el estudio, las bebidas energéticas suelen contener ingredientes que pueden intensificar los efectos de la cafeína o que pierden tener otros efectos secundarios como náusea y diarrea.

Las conclusiones aseguran que estas bebidas deberían ser controladas tan estrictamente como el tabaco, el alcohol o las medicinas bajo receta.

Fuente: Infobae.com