La magistrada Katia Miguelina Jiménez, de la Primera Sala de la Cámara Penal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional, se quejó ayer ante la SCJ por el hallazgo en su despacho de dos micrófonos, con los que entiende que alguien la espiaba.

Jiménez se encontraba en estrado junto a otros jueces conociendo medidas de coerción y, según una fuente, detectó el micrófono cuando bajó del estrado.



El informante  del periódico Hoy dijo que la magistrada reaccionó airada y de inmediato puso la denuncia ante el despacho del magistrado Rafael Luciano Pichardo, vicepresidente de la SCJ, y después al despacho de la presidenta de la Corte de Apelación, Mirian Germán Brito.

Consultada al respecto, Germán Brito confirmó que el hecho le fue denunciado y se limitó a decir que lo investigan.



Se supo que el hecho provocó un gran escándalo entre los jueces de la Primera Sala de la Cámara Penal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional, a la que pertenece la magistrada.

Aunque no se pudo confirmar, supuestamente también se encontraron micrófonos en la oficina del juez Antonio Sánchez Mejía, también miembro de la Primera Sala.