El juicio que se le sigue a los presuntos 9 sicarios de la red que dirigía el capo boricua José David Figueroa Agosto, inició este miércoles con las declaraciones de Madeline Bernard Peña, quien concluyó diciendo que del coronel con el que hablado su esposo José Amado González, solo recordaba que se apellida Martínez.
Los incidentes que retrasan el juicio no paran, hoy no se presentó a la sala de audiencias el testigo Casimiro Florentino, quien estaba entre los citados para rendir declaraciones.
El tribunal se dispuso a llamar a Bienvenido Antonio Saviñón, quien se presentó frente a la jueza sin ningún tipo de documento de identidad, por lo que no pudo rendir declaraciones.
Fue llamado entonces a testificar el vendedor de vehículos, Miguel Ramón Santos Comprés, quien dijo vendió dos modelos a González Gonzáles y a Cristian Almonte (Figueroa Agosto).
Manifestó que en un mismo día, González González y “Cristian Almonte”, compraron dos autos modelo Mazda valorados en más de 250 mil dólares en el 2009.
Aseguró que no tenía mucho tiempo conociendo a Cristian Almonte, pero que si conocía al coronel González González, porque había hecho varios negocios de venta de vehículos con éste, quien adquirió más de diez modelos.
Los involucrados en libertad condicional son Joel Antonio Feliz Medina y José Alberto Cruz Paredes, mientras los que guardan prisión son Gian Enrique Rojas Matos, Winston Antonio Rodríguez Tavárez, José Miguel Rodríguez Almonte, José Aníbal Hidalgo García, Ricardo Pérez Mateo, Wilhen Ortiz de los Santos y Diómedes Moya Durán.
Todos los implicados están acusados de participar en los crímenes, no sólo del coronel González, sino también contra el ingeniero Omar Antigua Polanco, el propietario de la repostería La Francesa, Rubén Soto Hayet, y de herir de bala a Bernard Peña, a José Luís Mejía Ramos y Agustín Romero.



Fuente:NoticiasSIN