Desde el lunes 26 de septiembre, los libros de récords indican que el inagotable Julio Franco ya no es el líder de hits entre los dominicanos en el beisbol de Grandes Ligas. El nuevo rey ahora es Vladimir Guerrero.



El toletero de los Orioles de Baltimore conectó un imparable en la parte baja de la sexta entrada ante el derecho Josh Beckett, de los Medias Rojas de Boston, para sumar su indiscutible 2,587 en sus 16 años de carrera, y de esa manera pasarle a Franco entre los jugadores nacidos en República Dominicana.

El antesalista de los Yankees de Nueva York Alex Rodríguezes el líder de todos los tiempos entre los jugadores de origen quisqueyano en todos los renglones ofensivos, pero hay que recordar que el toletero nació en Estados Unidos.



Aunque esta hazaña ha pasado casi desapercibida, lo logrado por Guerrero tiene mucho significado para la comunidad quisqueyana, tanto en la isla como en el exterior al tratarse de uno de los jugadores de mayor productividad en la historia del pasatiempo nacional en Estados Unidos.

La marca hubiera caído mucho antes si no fuera por todas las lesiones que ha tenido en temible bateador de Nizao, Provincia Peravia (al sur de Santo Domingo), en su carrera, que le han impedido incluso estar rondando los 3,000 indiscutibles.

Para Guerrero el solo hecho de ser el dominicano, entre tantos buenos jugadores que han pasado por las mayores, con más indiscutibles ya es un logro.

«He jugado por muchos años, 16 años, así que me siento muy bien, muy gratificante haber conseguido ese hit», le dijo el toletero a la prensa de Baltimore.

Y es que Guerrero en esas 16 temporadas ha hecho de todo con el bate, a tal punto de ser el segundo quisqueyano con mejor promedio de bateo (.318), superado por el gran Albert Pujols (.329) el tercer mejor jonronero (449), tercero en empujadas (1,496), tercero en anotadas (1,320)m, segundo en dobles (477). Además hay que decir que para ser un bateador de poder, Guerrero es el pelotero con mejor promedio de bases por bolas en relación a los ponches con 737 boletos y apenas 985 abanicados.

Sammy Sosa es el líder entre los dominicanos con 2,206 ponchetes y tan solo 929 boletos recibidos. Una diferencia del cielo a la tierra.

El jardinero y bateador designado de 36 primaveras, todavía tiene gasolina en el tanque para aumentar su propia marca. Asumiendo que juegue entre 135 a 140 juegos por tres temporadas más con un promedio de 136 incogibles en ese tiempo, el Jugador Mas Valioso de la Liga Americana en 2004 puede convertirse en el primer dominicano que llegue a los 3,000 hits.

Esto es si la salud no lo traiciona y mantiene el nivel que ha mostrado en estas dos últimas campañas.

De no lograrlo, igual sus estadísticas son más que dignas para llevar a Guerrero, tan pronto cumpla los cinco años reglamentarios, al Salón de la Fama de Cooperstown.

Nota redactada por el cronista Sadiel Lebrón en Espndeportes.com