WASHINGTON. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, defendió este jueves la negativa de su gobierno a facilitar el acceso a la píldora del día después a menores de 17 años, estimando que se trata de una medida de «sentido común».

«Como padre de dos niñas, creo que es importante asegurarnos de que usamos el sentido común en la normativa que regula el acceso a los medicamentos de venta libre», dijo Obama, interrogado sobre el tema en una improvisada conferencia de prensa en la Casa Blanca.



La Administración de Alimentos y Medicamentos estadounidense (FDA, por su sigla en inglés) rechazó el miércoles otorgar a una compañía farmacéutica el derecho a vender sin autorización la píldora del día después a menores de 17 años, explicando que la secretaria de Salud, Kathleen Sebelius, bloqueó cualquier flexibilización de la regulación.

Sebelius justificó su decisión haciendo hincapié en la diferencia de madurez entre las jóvenes mayores de 17 años y las adolescentes menores de esa edad.



El laboratorio Teva Pharmaceuticals, que fabrica la píldora Plan B, solicitó a la FDA que cambiase sus reglas para que el producto pudiera ser comprado libremente por mujeres de todas las edades.

«Por lo que entiendo, la razón por la cual Kathleen (Sebelius) ha tomado esta decisión es que no podía dar la posibilidad de que una (niña) 10 u 11 años comprara, junto a los chicles y las baterías, medicamentos que puedan tener efectos adversos. Pienso que la mayoría de los padres siente lo mismo», dijo Obama.

AFP