WASHINGTON.  El consumo excesivo de alcohol es más común en Estados Unidos de lo que se pensaba, sobre todo entre los adultos jóvenes, aunque los mayores de 65 años son quienes más frecuentemente se emborrachan, según un estudio gubernamental divulgado este martes.

Uno de cada seis estadounidenses, ó 17,1% de la población, bebe en exceso, definido como el consumo de cinco o más bebidas alcohólicas consecutivas entre los hombres y cuatro o más entre las mujeres, señaló un informe de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).



Los datos más recientes de 2010 muestran un aumento con respecto a 2009, que indicó que el 15% de los adultos estadounidenses, 33 millones, bebía en exceso, una tasa que se mantuvo durante más de 15 años.

Aunque el grupo de edad más común para el consumo excesivo de alcohol es el de 18-34, los que dijeron emborracharse más a menudo fueron los mayores de 65 años, dijo el informe «Signos vitales» de los CDC, que también advirtió de los riesgos del alto consumo de alcohol para la salud y la seguridad.



Los adultos mayores que beben en exceso dijeron hacerlo 5,5 veces al mes, en comparación con un promedio de cuatro veces al mes entre el resto de la población que se emborracha.

El grupo de 18-24 años registró la mayor cantidad de bebedores (28,2%) y tendía a beber más -9,3 bebidas-. El grupo de 25-34 años se colocó en un cercano segundo puesto (27,9%).

«Las borracheras de los adultos tienen un enorme impacto en la salud pública e influyen en la conducta de beber de los jóvenes menores de edad por el ejemplo que dejan», dijo Pamela Hyde del CDC, instando a reducir el consumo excesivo de alcohol.

Los datos fueron recogidos mediante una encuesta telefónica al azar en 48 estados y la capital federal.

Según la encuesta, el consumo excesivo de alcohol es más común entre aquellos con ingresos de 75.000 dólares o más al año, pero las personas que ganaban menos de 25,000 dólares al año se emborrachaban con mayor frecuencia.

Los bebedores de bajos ingresos tendían a emborracharse cinco veces por mes consumiendo 8,5 bebidas cada vez.

Los blancos y los hispanos eran más propensos a beber en exceso que los negros, mientras que los hombres se emborrachaban más que las mujeres.

«Beber excesivamente provoca 80.000 muertes al año en Estados Unidos y costó 223.500 millones de dólares a la economía en 2006», precisan los autores del informe.

«Beber demasiado contribuye a más de 54 lesiones y enfermedades diferentes, incluyendo accidentes automovilísticos, violencia y enfermedades de transmisión sexual», agregó.

Según los CDC, aumentar precio del alcohol, limitar los días y las horas en que se puede vender, y restringir licencias de venta en una zona geográfica podría ayudar a reducir el consumo excesivo de alcohol.

AFP