Santo Domingo. Juan Alejandro González Crisóstomo (El Vikingo) murió al recibir un disparo en la espalda en un incidente en que la Policía anunció como un intercambio de disparos, mientras que varios testigos confirmaron al periódico  EL DÍA que los agentes actuantes le implantaron un arma que buscaron en el destacamento de “La 40”, en Cristo Rey, luego de darle muerte.

El joven de 27 años se encontraba sentado en un solar cerrado, al que le llaman Villa San Rafael, cuando fue atacado por la patrulla policial, que sin mediar palabras le hizo el disparo.



El motorista Leonida Fulcar relató que él mismo fue obligado a punta de pistola a llevar a uno de los policías al destacamento de “La 40” a buscar el arma y que tuvo que esperar al agente para volverlo a llevar a la escena del crimen.

Relató que sacaron el arma de una funda negra y se la pusieron.



“Cuando llegó al destacamento lo tuve que esperar, volvimos al solar, le puso el arma en la mano al muerto (El Vikingo), le apretó dos veces para que disparara, luego lo sacaron arrastrando y lo tiraron en la camioneta”, reveló.

Un adicto

Los familiares de la víctima exigieron que los agentes actuantes sean enjuiciados por lo que calificaron como una ejecución criminal.

Reconocieron que el joven era un adicto a las drogas, pero que no le hacía daño a nadie y solía juntarse con otros adictos en el lugar donde ocurrió el suceso.

Otro testigo

El día del suceso Edwin Pérez estaba junto con “El Vikingo” y otros tres dentro del solar. Contó que el sábado al mediodía varios agentes, entre ellos los tenientes Batista López y otro conocido como “El Chino”, perteneciente al Departamento de Robos e Investigaciones del destacamento del sector abrieron las puertas y empezaron a disparar, lo que provocó que el grupo se dispersara.

Aunque Pérez corrió por su vida, otros vecinos del sector que observaban el suceso desde los edificios que bordean el solar afirman que uno de los policías pateo y arrastró a González Crisóstomo, y que este salió corriendo y gritando “no me maten que estoy vivo”.

La Policía se apresuró ayer a anunciar el suceso como un intercambio de disparos.

Reportaje de la periodista Dayana Acosta