Santo Domingo. La defensa de los dos acusados de organizar la matanza de gentes ligados al presunto narcotraficante José David Figueroa Agosto, responsabilizó a la Fiscalía de convertir en “monstruos” a los encartados en el caso de sicariato.



En sus conclusiones, la abogada de los imputados Gián Enrique Rojas Matos y Winston Rodríguez Almonte, señalados por las autoridades como “brazo ejecutor”al servicio de Figueroa Agosto, acusó al Ministerio Público de satanizar a los acusados sin tener pruebas.

La abogada Manuela Ramírez explicó al Cuarto Tribunal Colegiado del Distrito Nacional que el órgano acusador (Fiscalía) no ha presentado pruebas que vinculen a Rojas Matos con Figueroa Agosto, procesado en Estados Unidos por delito federal.



“Yo sé que el tribunal tiene mucha presión porque a cada rato vienen algunos “carajos” a pedir condenas. Las víctimas de este caso le están diciendo a la sociedad dominicana: yo no creo que los asesinos estén sentados ahí, y por eso nos presentan este circo”, adujo Ramírez, quien además es abogada del imputado Ricardo Pérez Mateo.

Señaló que la Fiscalía ha tratando el caso de homicidio como si se tratara de lavado.

“¿Dónde rayos se vincula a Gián Enrique Rojas con Figueroa Agosto? Se preguntó.

En cuanto a Winston Antonio Rodríguez Almonte, señalado como la persona que tenía en su poder las armas con la que se asesinaron al coronel José Amado Gonzáles Gonzáles, Omar Antonio Antigua Polanco y al propietario de la Repostería La Francesa, Rubén Soto Hayet, Ramírez dijo que a su defendido no se le encontrón nada comprometedor y que Rodríguez Almonte se entregó voluntariamente a las autoridades.

La abogada continúa replicando la acusación y el pedimento del Ministerio Público, que solicita pena de 30 años para 7 de los imputados, y 20 para 3 de ellos.

El Cuarto Tribunal Colegiado integrado por los jueces Pilar Rufino, Daniel Nolasco y Daira Cira Medina, conoce el juicio de fondo a la red de los 9 supuestos sicarios de Figueroa Agosto. El juicio está en su fase final; ya la Fiscalía presentó sus conclusiones y la defensa ahora la está replicando.

Por Domingo Berigüete