MIAMI. El venezolano Oswaldo Guillén, mánager de los Miami Marlins, pidió perdón el martes a las comunidades cubana y venezolana de Miami por la polémica declaración donde admitió su admiración por el líder cubano Fidel Castro que, además, le costó cinco juegos de suspensión.



«Estoy aquí para perdir perdón por haber herido a las comunidades cubana y también venezolana», dijo Guillén en una nutrida rueda de prensa en el Marlins Park. «Me siento como si hubiera traicionado a la comunidad latina. Pido perdón con el corazón en la mano y de rodillas a los cubanos y a los latinos», agregó.

Los Miami Marlins, a su vez, anunciaron en su página en internet la suspensión de Guillén por cinco partidos de manera «inmediata».



«Los Marlins reconocen la seriedad de las declaraciones atribuidas a Guillén. El dolor y el sufrimiento causado por Fidel Castro no puede ser minimizado, especialmente en una comunidad llena de víctimas de la dictadura», indicó el equipo en un comunicado.

El sábado, tras las explosivas declaraciones, los Marlins emitieron un primer comunicado en el que afirmaban que no había «nada que respetar» sobre Castro, y lo calificó como un «dictador brutal».

La controversia se generó por un artículo aparecido el viernes pasado en la edición online de la revista Time, en las que el piloto venezolano manifestó su «amor» y «respeto» por Castro al permanecer en el poder por tanto tiempo.