WASHINGTON. Las temperaturas comenzaron a mermar este lunes en el centro y este de Estados Unidos tras un pico de calor de varios días que provocó la muerte de decenas de personas.

Luego de días con temperaturas a veces superiores a los 40 grados, una ola de aire fresco proveniente de Canadá da un respiro a los habitantes de los Estados más afectados, según los servicios nacionales de meteorología.



Maryland (este) registró 13 muertos por la canícula desde el 8 de junio, de los cuales 11 personas mayores de 65 años, informó Ed McDonough, portavoz de la agencia encargada de emergencias en el Estado.

«Esperamos que haya terminado», agregó.



En Ohio (norte) tres personas que sufrían problemas cardíacos también fallecieron debido a las altas temperaturas.

Por su parte, en Chicago la prensa informó de 18 fallecimientos, mientras en Indiana un niño murió tras haber sido olvidado dentro de un automóvil al rayo del sol, según el sitio indystar.com.

Otros fallecimientos fueron constatados en los estados del este del país: Virginia, Nueva Jersey, Pensilvania y Tennessee.

Por su parte, el fuerte calor provocó otros problemas: en Washington, un metro se descarrilló debido a la temperatura y dejó varios heridos el viernes. En Wisconsin (norte) el bitumen de las carreteras sufrió bastante.

Con la baja de la temperatura, los meteorólogos han advertido acerca de la probabilidad de fuertes tormentas.

AFP