NUEVA DELHI. El apagón gigante que el martes dejó a la mitad de la población de India sin electricidad evidenció las carencias de las infraestructuras eléctricas y la necesidad de encontrar nuevas fuentes de suministro en un país emergente que sueña con ser superpotencia.

El súper apagón, que empezó a las 13H00 horas locales (07H30 GMT) y se resolvió definitivamente este miércoles por la mañana, afectó a unas 600 millones de personas en gran parte del territorio, desde la frontera con Pakistán hasta el noreste, cerca de la frontera china, incluyendo la capital, Nueva Delhi, y las ciudades de Calcutta y Lucknow.



El lunes un primer apagón ya había afectado a 300 millones de habitantes.

Según las autoridades, estos dos apagones en pleno verano fueron provocados por varios estados que rebasaron el límite de suministro autorizado en sus redes eléctricas y desencadenaron un efecto dominó.



En India, donde la electricidad proviene principalmente del carbón, los apagones son muy frecuentes y en las horas punta de consumo la oferta es inferior en 12% a la demanda, según datos del gobierno.

El grupo público Coal India no tiene capacidad para responder a la demanda por falta de combustible y de tecnología moderna, mientras espera las autorizaciones para construir nuevas centrales.

Las autoridades tienen planes de construcción de centrales nucleares, para que el porcentaje de energía nuclear en la producción eléctrica pase del 3% actual al 25% hacia 2050. Pero los empresarios y los analistas coinciden en que se necesitan reformas urgentes.

«Es imperativo que nuestras infraestructuras de base» respondan a las aspiraciones de los agentes económicos del país, sostiene el director general de la Confederación India de la Industria, Chandrajit Banerjee.

La factura de la electricidad, más cara

Según los analistas, India tiene que asegurarse que las comisiones locales de electricidad de cada estado respeten sus cuotas de consumo al tiempo que mejora la red de distribución para evitar situaciones de crisis.

Aunque existe un sistema de sanciones si se rebasa el máximo autorizado, las multas cuestan menos que comprar energía en el mercado libre, por lo que los estados no dudan en superar el máximo permitido. Por eso el estado central tendría que aumentar el precio de la energía en el mercado regulado, según los analistas.

Los frecuentes robos de energía y las conexiones no autorizadas a la red son también un problema muy frecuente, que sólo podría resolverse con importantes inversiones.

Sin embargo todas estas medidas aumentarían el precio de la electricidad para el consumidor final, una decisión que necesita voluntad política por parte de un gobierno que ya se enfrenta al descontento popular a causa de la fuerte inflación.

Según Seema Desai, una analista del grupo de investigación Eurasia Group, con todas esas medidas la factura de la luz podría aumentar hasta un 40% en algunos estados.

El apagón gigante volvía a copar este miércoles los titulares de la prensa india, que destacaba el ridículo en la escena internacional que hizo un país donde el sentimiento de orgullo nacional está muy arraigado.

«India superpotencia. Descanse en paz», titulaba el periódico The Economic, que considera que la imagen de India como epicentro de la alta tecnología recibió un duro golpe.

Por su parte The Times of India titulaba: «Sin energía y sin saber qué hacer» y proponía cinco medidas, entre ellas contratar a reguladores competentes.

El periódico también ironizaba sobre la decisión del gobierno el martes de poner al ministro de Energía en Interior en pleno apagón. «Es como cambiar el capitán del Titanic tras haber chocado contra un iceberg», aseguraba el periódico.