El mundo de la ingeniería genética sigue cayendo aún más en lo surrealista con el anuncio de que en Nueva Zelanda “científicos” han dado a conocer una vaca mutante , clonada y genéticamente modificada que dicen que produce leche baja en alergenos para el consumo de los bebés humanos. Esta noticia está siendo divulgada por la BBC y en otros lugares.



Como si se tratara de una película de carater ‘gore’, estos Franken-cientificos clonaron una vaca y luego modificaron el embrión manipulando el ARN (ácido ribonucleico).

Después de la gestación, la vaca mutante GMO nació sin cola. Sin embargo, estos “científicos” dicen que “no hay problema”, y que la mutación de no tener cola no está relacionado con algo que ellos hayan hecho con con el ADN de la vaca…



Y no es invento. Esta es la locura del mundo de la “ciencia” en la que ahora vivimos. Se experimenta con los ladrillos de la vida bajo excusa de buscar una solución a “las alergias que produce la lecha” mientras que es sabido que las alergias en su mayoría son provocadas por la pasteurización de la leche.

Para empezar, todo el proyecto es una tontería, ya que la razón por la que mayoría de los humanos son alérgicos a la leche de vaca es debido a que la pasteurización destruye las enzimas de lactasa.

La leche cruda es mucho más fácil de digerir, pero por supuesto la leche cruda ha sido prácticamente tipificada como delito en Estados Unidos, donde la FDA junto con el Condado de Ventura y el condado de Los Ángeles en California realizan incursiones armadas en los centros de distribución de leche cruda y echan a la gente en la cárcel.

James Stewart, por ejemplo, permanece en la cárcel hasta el día de hoy por el “delito” de estar relacionado con la leche sin pasteurizar. (desde aca se puede acceder a firmar una petición para exigir su liberación).

Así, mientras que se criminaliza la leche fresca y se protege a una leche muerta, inferior, y pasteurizada que causa alergias en los que la beben, es casi seguro que el sistema alimentario  abrace la leche de vaca mutante genéticamente modificada de una vaca clonada y que  llaman “segura” para los niños…

No importa el hecho de que la leche genéticamente modificada producida por la vaca tenga “el doble de las concentraciones de caseína”, como lo reportó el periodico The Guardian.

Por cierto, la leche producida por este mutante de vaca  clonado sin cola  geneticamente modificada es, por supuesto, 100% impulsado por hormonas artificiales. Según informa la BBC:

“La vaca todavía no se ha preñado por lo que no ha producido leche normalmente por lo que los científicos usaron hormonas para poner en marcha la producción de leche.”