WASHINGTON.  Barack Obama asumió este domingo su segundo mandato como presidente de Estados Unidos al jurar en una ceremonia privada con su familia en la Casa Blanca, la víspera de múltiples y gigantescas festividades en Washington a las que acudirán centenares de miles de personas.

Obama



«Yo, Barack Hussein Obama, juro solemnemente que cumpliré fielmente las funciones de presidente de Estados Unidos, y que haré todo en mi poder para preservar, proteger y defender la Constitución de Estados Unidos», dijo Obama a las 11H55 locales (16H55 GMT) ante el juez de la Corte Suprema John Roberts.

Durante la ceremonia de menos de un minuto en el Salón Azul de la residencia presidencial ante solo un puñado de personas, entre ellas la familia de Obama y algunos periodistas, Obama tomó juramento con su mano izquierda sobre la Biblia de la familia de su esposa Michelle, quien sostenía el libro.



Tras la ceremonia, Obama, demócrata de 51 años, abrazó a su esposa, que llevaba un vestido azul, y a sus dos hijas Malia, de 14 años, y Sasha, de 11, antes de decir «lo hice».

«No lo estropeaste» se congratuló Sasha, en una referencia a 2009, cuando el juramento debió ser repetido luego de una equivocación del juez Roberts.

Obama, el 44° presidente de Estados Unidos, cumplió con la Constitución del país, que establece que los mandatos presidenciales comienzan los 20 de enero al mediodía tras las elecciones, pero volverá a jurar el lunes ante medio millón de personas -muchas menos que en 2009- frente al Capitolio.

El vicepresidente Joe Biden, de 70 años, también tomó juramento el domingo, en otra ceremonia privada presidida por la única jueza hispana de la Corte Suprema, Sonia Sotomayor.

La noche del domingo, en una recepción con seguidores que lo ayudaron a vencer al republicano Mitt Romney en las elecciones de noviembre, Obama habló en un tono conciliador que se espera prevalezca en su discurso inaugural del lunes.

«Lo que la investidura nos recuerda a todos es el papel que tenemos como ciudadanos para promover el bien común mientras cumplimos con nuestras responsabilidades individuales», dijo Obama.

Los retos del mandatario en su nuevo mandato de cuatro años serán múltiples, pero una de sus prioridades será una prometida reforma migratoria integral, para formalizar la situación de los más de 11 millones de indocumentados, según ratificó a la cadena ABC uno de sus asesores, David Plouffe.

Jornada histórica

Minutos antes del mediodía del lunes, con la mano derecha levantada y la izquierda sobre dos Biblias -una del expresidente Abraham Lincoln y otra del defensor de los derechos civiles Martin Luther King-, Obama tomará juramento nuevamente.

Aunque la expectativa este año es menor que en 2009, cuando Obama hizo historia al convirtirse en el primer negro en ocupar la presidencia estadounidense, hay miles de eventos celebratorios.

Los hispanos, primera minoría del país y con creciente peso electoral, están representados en los festejos: este domingo concurrieron a una gala hispana en el Kennedy Center estrellas como Eva Longoria, Antonio Banderas y José Feliciano, en tanto la banda mexicana Maná y Marc Anthony están incluidos en el baile inaugural del lunes en el centro de convenciones de Washington.

«Este es su momento y Estados Unidos está en deuda con ustedes», dijo el vicepresidente Biden ante los miles de hispanos, entre ellos destacadas personalidades de las artes y de la política, que colmaron el Kennedy Center, para escuchar al tenor peruano Juan Diego Flórez y el cantante Prince Royce.

Obama inicia su segundo mandato sin la coyuntura económica de 2009 que afectó al país y con un índice de aprobación superior al 50%, pero con nuevos temas en su agenda, como la lucha contra la violencia de las armas de fuego tras la masacre en una escuela de Newtown (Connecticut, noreste) a mediados de diciembre o los problemas presupuestarios.

En política exterior, Estados Unidos sigue de cerca los programas nucleares de Irán y Corea del Norte, el auge de China, el desarrollo de la guerra civil en Siria y mantiene la lucha antiterrorista como una de sus prioridades, después de la muerte del jefe radical islamista Osama bin Laden en mayo de 2011 y los recientes ataques perpetrados por grupos vinculados a Al Qaida en el Norte de África.

Luego de su discurso el lunes ante la multitud, Obama y su esposa recorrerán la Avenida Pensilvania que une el Capitolio con la Casa Blanca y la jornada culminará con el baile de investidura en el centro de convenciones, donde también participarán cantantes como Stevie Wonder y Katy Perry. AFP