El pleno de miembros de la Junta Central Electoral (JCE) dejó ayer abierta la posibilidad de intervenir en la crisis del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), que actualmente se bate entre las facciones lideradas por el ex presidente de la República, Hipólito Mejía, y el presidente de la organización política, Miguel Vargas Maldonado.

Sin embargo, el organismo electoral deja claro que sólo intervendría en los casos que establece la ley 275-97, que en su artículo 6, literal q, apunta entre sus atribuciones, “fiscalizar, cuando lo estime necesario o conveniente, por iniciativa propia o por solicitud, las asambleas y convenciones que celebren los partidos para elegir sus autoridades y/o nombrar sus candidatos a cargos electivos, procurando en todo momento que éstas sean efectuadas con estricto apego a lo que dispone la ley, los reglamentos y los estatutos, sin la cual serán nulas”.



“En ese sentido, el Pleno de la Junta Central Electoral, en ejercicio de sus atribuciones, acoge valorar, en su momento si fuere necesario, la conveniencia de intervenir sólo en los casos que establece la ley, siempre y cuando se trate de eventos para elegir las autoridades internas o para seleccionar a los candidatos a cargos de elección popular”, dice el comunicado de la JCE.

“Para esta institución, la situación de esta organización política, es exclusiva de uno de los partidos del sistema, y debe ser superada con las iniciativas, esfuerzos y normas legales y estatutarias puesta a su alcance; sus líderes, por el bien del país, la estabilidad de la democracia y la fortaleza del sistema de partidos, deben contribuir a encausar a su partido por los principios y valores que están contenidos en el artículo 216 de la Constitución de la República. La JCE confía en la capacidad y voluntad de la unidad interna de sus miembros y al respeto a las decisiones institucionales”.