mujer ejecutiva

 

El 50% de las personas cree que la vestimenta influye significativamente en la oportunidad de ser promovido, según un estudio de la empresa de recursos humanos Robert Half.



Según analiza Karina Pérez, directora asociada de Robert Half, efectivamente la ropa es parte de la postura profesional de una persona, y afecta en cómo los jefes y superiores ven a un empleado.

“Las personas deberían tratar de alinearse a las políticas de la organización. Si se usa traje y corbata, pues tratar de usarlo siempre, respetar si la organización es más bien formal. Por el contrario, si la empresa es más relajada pues se ve mejor una persona que vaya vestido casual a la oficina. Lo que si hay que entender es que hay determinadas vestimentas que no se ven adecuadas en un marco profesional así que hay que tratar de evitar usarlas para el trabajo”, advierte la ejecutiva.



Respecto de si vestirse de forma más particular afecta la opción de un ascenso, la experta afirma que no necesariamente influirá en la decisión de los superiores, pero sí influye en la imagen que ellos tienen de la persona.

“Son muchas las variables que se toman en cuenta para esto, y donde el desempeño profesional y las habilidades son lo más importante. Pero efectivamente vestirse acorde al cargo al que se aspira ayuda a que los demás tengan una imagen positiva y puedan proyectar a la persona en el cargo”.

Destaca Publimetro empleo que en cuanto a la entrevista de trabajo, la ejecutiva recomienda presentarse formal para causar una buena primera impresión en el potencial empleador.

Sin embargo, Pérez sostiene que “luego de la primera entrevista la persona puede ajustar su vestimenta a lo que vio en la empresa y en el entrevistador si fuera el caso”.