Un estudio reciente en Suecia sugiere que el mantener una dieta rica en antioxidantes podría reducir el riesgo de insuficiencia cardíaca.

Los antioxidantes son unas moléculas que sirven para prevenir el daño que se produce en las células y en los tejidos del cuerpo debido a los procesos corporales normales y a la exposición a algunos productos químicos. El potencial de beneficio médico de los antioxidantes puede residir en su capacidad para prevenir o retrasar la oxidación de las moléculas en las partes microscópicas del cuerpo, como en el ADN o en las proteínas.



Las primeras investigaciones sobre los antioxidantes investigaron su posible uso para prevenir que las grasas comestibles se volvieran rancias debido a la oxidación. Las vitaminas A, C y E fueron algunos de los primeros antioxidantes identificados por la ciencia médica como posiblemente beneficiosas para la salud humana. Además de encontrarse en una variedad de frutas y verduras, los antioxidantes se pueden obtener en suplementos. De hecho, hoy en día son una de las categorías más populares entre los suplementos disponibles. Se ha propuesto que los antioxidantes podrían desempeñar un papel en la prevención de muchos trastornos comunes de salud, como la enfermedad de Alzheimer, las enfermedades del corazón y algunos tipos de cánceres.

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En un nuevo estudio, los investigadores evaluaron los datos de 33.713 mujeres de la Población Base Sueca de Mamografías (Swedish Mammography Cohort) desde el 1995. Se recopilaron estimados de la capacidad total antioxidante a través de cuestionarios. Posteriormente, se recogieron datos sobre la insuficiencia cardiaca hasta el 2009 a través de los registros de salud de las participantes.

Se identificaron 894 casos de insuficiencia cardíaca durante los 11,3 años de seguimiento. Los investigadores encontraron que las mujeres que reportaron que llevaban las dietas con la mayor capacidad antioxidante total tuvieron un 42 por ciento menor riesgo de insuficiencia cardiaca en comparación con las que consumían las dietas con la más baja capacidad antioxidante total.

Los autores del estudio concluyeron que estos hallazgos apoyan la idea de que el mantener una dieta rica en antioxidantes puede reducir el riesgo de insuficiencia cardíaca. Aunque los resultados del estudio son prometedores, se justifica investigación adicional antes de llegar a una conclusión definitiva.

Los antioxidantes se encuentran en cantidades variables en los alimentos, como las verduras, las frutas, los cereales, las legumbres y los frutos secos. Algunos antioxidantes como el licopeno y el ácido ascórbico pueden degenerarse si se almacenan a largo plazo o por la cocción prolongada. Otros compuestos antioxidantes son más estables, como los antioxidantes polifenólicos que se encuentran en ciertos alimentos como los cereales de trigo integral y el té. En general, se cree que los alimentos procesados contienen menos antioxidantes que los alimentos frescos y sin cocer ya que los procesos de preparación de la comida pueden exponerlos al oxígeno, informa vidaysalud.com, en su portal.

Para obtener más información acerca de los antioxidantes, incluyendo el beta-caroteno, el licopeno, la rutina, la vitamina E y otros, por favor visita nuestro Diccionario de Remedios y Tratamientos Naturales, elaborado en colaboración con Natural Standard, o utiliza nuestra casilla de búsqueda en la barra azul hasta arriba a la derecha.