Santo Domingo. Solo el 50 % de los pacientes diagnosticados dominicanos con esquizofrenia recibe una o más intervenciones de supervisión y de medicamentos lo que degenera en un profundo deterioro que trunca vidas productivas, puesto que la patología se manifiesta entre los 20 y los 30 años, e incluso, en la adolescencia.

La Sociedad Dominicana de Siquiatría alertó sobre la importancia de que el Estado elabore políticas para enfrentar ese y todos los trastornos mentales, y sugirió que empiece por extender el suministro de medicamentos de calidad a la población de escasos recursos, porque su alto costo provoca el abandono del tratamiento.



El presidente del gremio, Vicente Vargas, dijo en un comunicado que los pacientes admitidos en el hospital siquiátrico Padre Billini son diagnosticados en su mayoría por trastornos del ánimo y esquizofrenia y que los de estratos sociales más bajos tienen poco seguimiento después de que son dados de alta.

Vargas citó un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que consigna que pese a que el país cuenta con una ley de Salud Mental, y a que se ha desarrollado un Plan Decenal 2006-2015, no tiene una política explicita para enfrentar ese mal, que aunque no se cura, puede controlarse.



«El costo de los medicamentos antisicóticos representa el 12 % del salario mínimo y el de los antidepresivos el 10 %», dijo Vargas basado en el informe de la OMS, que arrojó que solo el 7 % accede a los fármacos que provee el Estado.

Vargas habló en un simposio en el que los psiquiatras discutieron los métodos y tratamientos más eficaces para manejar la enfermedad y la necesidad de que se fomenten programas para vigilarla.

Explicó que los pensamientos de los esquizofrénicos están desconectados de la realidad, oyen voces, tienen visiones, alucinan, se vuelven paranoicos y son apáticos.

Dijo que es una enfermedad en la que influyen la genética y el medio ambiente y que existen cinco tipos: la paranoide, desorganizada o hebefrénica, catatónica, indiferenciada y la residual.EFE