Moscú. El presidente ruso, Vladímir Putin, dijo hoy que él no puede asegurar al cien por cien que Siria cumpla el plan de eliminación de sus armas químicas, aunque manifestó su esperanza en que ello será posible.

«No puedo afirmar al cien por cien que se logre llevar a cabo todo hasta el final (el plan de desarme químico). Pero todo lo que hemos visto hasta ahora en los últimos días nos infunde la seguridad de que se hará», dijo Putin durante una intervención en el club internacional de debate «Valdái».



Según Putin, «hasta ahora todo apunta a que Siria ha aceptado nuestra propuesta y está dispuesta a actuar de acuerdo con el plan que elabora la comunidad internacional en el marco de la ONU».

«Siria ha anunciado que está dispuesta a ingresar, y no sólo dispuesta, sino que se considera ya miembro de la Convención Internacional para la Prohibición de Armas Químicas», indicó.



El jefe del Kremlin insistió en que estos son pasos prácticos ya adoptados recientemente por Damasco y expresó su confianza en que el líder sirio, Bachar al Asad, pueda ser convencido de que se deshaga de todo su arsenal químico.

En cuanto a los ataques químicos en ese país árabe, que fueron confirmados esta semana en un informe por los inspectores de la ONU, Putin llamó a investigarlos todos.

«Disponemos de todos los argumentos para suponer que esto fue una provocación, sagaz, por supuesto, inteligente, pero por la técnica empleada, primitiva», manifestó, en alusión al ataque perpetrado el pasado 21 de agosto cerca de Damasco.

Putin destacó que, a la hora de lanzar dicho ataque, se utilizó «una viejo proyectil de fabricación soviética cogido del arsenal de las Fuerzas Armadas sirias».

«Lo principal es lo que estaba allí escrito: ‘Hecho en la URSS’. Pero este no fue el primer caso de uso de armas químicas en Siria. ¿Y por qué no investigaron los anteriores sucesos?», preguntó.

El líder ruso instó a investigar todos los casos de posible uso de armas químicas durante el conflicto sirio.

«Si logramos, al fin y al cabo (…) responder a la pregunta de quién lo hizo, quién cometió ese crimen (…), entonces nosotros junto a otros colegas del Consejo de Seguridad de la ONU deberemos dirimir la responsabilidad de aquellos que cometieron ese crimen», resaltó.

Al mismo tiempo, negó que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, sólo hubiera aceptado la propuesta rusa de conminar a Damasco a que pusiera su arsenal químico bajo control internacional para «salvar la cara».

«El asunto no tiene nada que ver ni con la cara ni con la salvación de nadie. Esa fue su decisión (de Obama), basada en el análisis de la situación real. Y yo estoy muy contento de que nuestras posturas en dicho asunto coincidieran», comentó.

El viceministro de Exteriores ruso, Serguéi Riabkov, aseguró ayer tras reunirse con Al Asad en Damasco que Siria había dado garantías a Rusia de que entregaría su arsenal químico a tiempo.

Riabkov recordó que la información sobre los arsenales químicos del país árabe deben de ser entregados en La Haya dentro del plazo de una semana desde el acuerdo ruso-estadounidense del 14 de septiembre. EFE