Santo Domingo. El Senado analizará la revisión de la línea divisoria con Haití, a fin de verificar el cumplimiento fiel del Tratado fronterizo Dominico-Haitiano de 1929 y su Protocolo de Revisión de 1936, ya que fueron borradas las reliquias del «Fuerte de Cachimán», donde el general Antonio Duvergé selló definitivamente la independencia nacional.

map_hispaniola



Según una resolución presentada por el senador fronterizo Adriano Sánchez Roa, en la actualidad se están repitiendo situaciones similares, a las que cuando el país tuvo que dejarle a Haití alrededor de 6 mil 200 kilómetros cuadrados porque al revisarse, numerosas demarcaciones, como fue el caso de Hincha donde nació Pedro Santana, estaban ocupadas por familias haitianas, «precedente histórico que debe llamar a la reflexión al Estado y al pueblo dominicano».

Explicó que en la actualidad existen lugares dominicanos donde más de la mitad ya están ocupados por nacionales haitianos, lo que obliga al Estado dominicano a actuar con urgencia y determinación, pues se trata de la protección y defensa de la integridad del territorio nacional.



«Se debe dotar al Ministerio de Defensa de los recursos económicos necesarios para que el Ejército, el Instituto Cartográfico Militar, el Cesfront y la dirección de las Comunidades Fronterizas, pongan en marchan un amplio e intenso Plan que garantice aún más la vigilancia y seguridad, además contribuir con el desarrollo fronterizo, dando cumplimiento al Artículo 10 de la Constitución de la República», dijo.

La pieza de Sánchez Roa exhorta al presidente Danilo Medina coordinar con el Gobierno haitiano el cumplimiento del Artículo 3 del Protocolo de Revisión del Tratado del 1929, que acuerda la construcción de la carretera internacional de manera conjunta por los dos Estados, que servirá como delimitación física, de forma que ésta resulte absolutamente inequívoca del territorio que corresponde a cada Nación.