Santo Domingo. Falcondo, la subsidiaria en la República Dominicana de la minera canadiense Falconbridge, dijo hoy que sus operaciones en Monseñor Nouel (norte del país) continuarán temporalmente cerradas hasta que mejoren los precios internacionales del níquel que le obligaron a tomar la decisión en octubre pasado.

Falcondo



Una vez «se den las condiciones óptimas del mercado» para retomar las operaciones y «tan pronto sea oportuno», Falcondo informó de que «iniciará la construcción/conversión de una planta de generación eléctrica que le permitirá ser más productiva, eficiente y competitiva frente al panorama mundial», lo que la empresa calculó en 2 o 3 años.

Así lo indicó en un comunicado en el que anunció la designación de su nuevo presidente y gerente general, David Soares.



Soares será el responsable de guiar las operaciones y proyectos futuros de la multinacional en la República Dominicana, «con la firme determinación de lograr que la empresa continúe aportando a la economía del país y potencie el valor para las comunidades», según la nota.

«Queremos continuar siendo parte activa de esa transformación a la que aspiramos como nación, en especial, de las provincias de Monseñor Nouel y La Vega, contribuyendo desde nuestra empresa a encontrar caminos viables y sostenibles de crecimiento económico y social», subrayó Soares.

Asimismo, dijo que aunque la empresa se encuentra en una «parada temporal de mantenimiento», continuarán esforzándose «por buscar la viabilidad de proyectos que permitan el desarrollo sostenible y cuidado del medio ambiente de manera responsable, asegurando el futuro de la empresa».

La decisión de Falcondo fue anunciada el pasado 2 de octubre, un día después de que la Cámara de Diputados local declarara como parque nacional una montaña del centro del país, que la minera pretendía explotar para ampliar sus operaciones, aunque la firma dijo que esa medida nada tenía que ver con el cierre.

Ejecutivos de la empresa canadiense informaron entonces que los deprimidos precios internacionales del níquel eran la causa de la paralización, que afectará a casi 1.000 empleos directos y otros 10.000 indirectos.

Falconbridge explicó que el níquel se cotiza a unos 6,0 dólares la libra, lo que hace «imposible» la rentabilidad de su explotación y precisó que en 2012 la empresa perdió unos 17 millones de dólares, mientras que en 2013 las pérdidas son aún mayores.

De acuerdo a su previsión, Falconbridge puede volver a operar en unos 2 ó 3 años, siempre y cuando las condiciones lo permitan.

No es la primera vez que Falconbridge paraliza sus trabajos en el país, la última de estas fue en 2008, cuando también alegó una caída en los precios del níquel. La reapertura de sus explotaciones se produjo hace algo más de dos años. EFE