SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El embajador dominicano ante El Vaticano, Víctor Grimaldi, reapareció ahora con un mensaje de simpatía del papa Francisco sobre el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, arzobispo de Santo Domingo, y que le habría sido dicho el 23 de febrero del 2014, en un saludo en la puerta de la Casa de Santa Marta.

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Monseñor López Rodríguez se encuentra en Roma, participando en actividades propia de sus responsabilidades como cardenal y arzobispo de Santo Domingo. Grimaldi lanzó una denuncia a mediados de febrero en el sentido de que el embajador de los Estados Unidos en República Dominicana, James Wally Brewster, conspiraba junto con los grupos homosexuales para destronar al cardenal López Rodríguez.

El funcionario fue desautorizado por el Ministerio de Relaciones Exteriores y por el gobierno dominicano, tomando en cuenta que el embajador Grimaldi dirigió una carta al papa Francisco denunciando al embajador de los Estados Unidos en la República Dominicana.



Grimaldi reiteró que él defiende la Constitución Dominicana, porque en el país está prohibido que un hombre se case con otro hombre, como hizo en Estados Unidos el embajador americano.

Destaca Acento.com.do que Grimaldi en la tarde de este martes remitió el siguiente mensaje sobre las palabras del papa elogiando al cardenal López Rodríguez:

«Él es Bueno», nos dijo Papa Francisco el Domingo 23 febrero 2014 refiriéndose al Cardenal delante de mi y mi esposa.

Estábamos a la puerta de entrada de Casa San Marta. Al aire libre, el Coro de jóvenes de la Capilla Sixtina acababa de entonar un canto gregoriano delante de nosotros.

Éramos unas treinta personas, quizás menos, los que nos encontrábamos en este lugar situado entre la Puerta de los Rezos de la Basílica Vaticana, y la residencia del Papa.

«Santidad», le dije cuando concluyó de cantar el coro. Estábamos a unos cinco pasos de distancia.

Papa Francisco se acercó a nosotros. Nos dio un apretón de manos a cada uno, y conversó a voz baja con Nicolás de Jesús.

Cuando concluyeron ellos dos de conversar -una de varias veces en estos días de Consistorio, pues habíamos también participado con el Papa en la misa del domingo- Francisco sonrió y nos dijo a mi esposa Rita y a mí:

«Él es Bueno», refiriéndose al Cardenal López Rodríguez.