Por Ramón Santos Lantigua

Santo Domingo. El merengue, la salsa, la bachata, el rock y algo de vallenato fueron los protagonistas hoy de la principal gala del arte dominicano que otorgó su máximo premio, «El Gran Soberano», al comediante local Cuquín Victoria, icono y referente obligatorio del humor por varias generaciones.



Cuquin Victoria

Los Premios Soberano no tuvieron en esta oportunidad un artista o agrupación que avasallara con las estatuillas, pero sí dejó sentir nueva vez el ardor cadencioso de los ritmos tropicales en la voz de artistas del calibre del colombiano Carlos Vives, el venezolano Óscar De León o del dominicano Johnny Ventura.



Alusiones al momento actual que viven Colombia y Venezuela, también tuvieron eco en la gala celebrada en el Teatro Nacional Eduardo Brito de Santo Domingo.

El propio Vives habló sobre su país, tras interpretar «Volví a nacer», con el que regresó a los primeros planos luego de años de ausencia, y recibir un «Soberano Solidario» por su labor altruista.

«Quiero compartir esta distinción con la clase artística dominicana, me siento orgulloso y es un honor muy grande recibirlo junto a ustedes (…) muchas gracias por hablar bien de mi y de esa otra Colombia que es más verdadera que la que vemos por televisión», dijo el cantautor bajo un cerrado aplauso y antes de expresarse con gentileza hacia los dominicanos Ventura, Wilfrido Vargas y Juan Luis Guerra, presentes en la ceremonia.

Guerra, al igual que su colega colombiano, recibió un premio similar por los aportes que realiza a través de su fundación a diversos sectores necesitados del país, principalmente en el área de la salud.

El cantautor dominicano logró también el premio al mejor artista y/o agrupación del año, mientras que Romeo Santos se llevó el galardón de autor de letras por «Propuesta indecente».

El presentador de televisión venezolano Daniel Sarcos exclamó, tras recoger su premio en ese renglón: «la fuerza no puede terminar siendo la razón en Venezuela», y recibir una gran ovación.

Desde sus inicios, la premiación se decantó por el contagioso merengue de Johnny Ventura, conocido como «El Caballo», quien derrochó su inagotable energía con algunos de sus grandes éxitos y haciéndose acompañar de jóvenes intérpretes como Alina Vargas, Tueska, Sensato del Patio y el grupo La Nueva Escuela.

El rock en español de Toque Profundo, la agrupación local en su género más conocida, fue premiada con un «Soberano Especial», luego ser el centro de un segmento interesante en el que sus temas fueron interpretados por el veterano bolerista Niní Cáffaro, el salsero Álex Matos y el bachatero Luis Segura.

Los ritmos urbanos, tan de moda en estos días en el país, brillaron con las actuaciones de Mozart La Para y Vakeró, premiado en esa categoría, luego de superar un período de inestabilidad a raíz de sus problemas con su encarcelada esposa, la cantante Martha Heredia.

El merengue volvió a retumbar en la sala con un popurrí de los más conocidos temas de Bonny Cepeda, uno de los «clásicos» del ritmo, reconocido con un «Soberano al Mérito» por su trayectoria de más de 30 años.

Bonny Cepeda

La premiación recordó a los artistas fallecidos en el último año, entre ellos al cantante Francis Santana «El Songo», homenajeado en la exquisita voz de Maridalia Hernández.

La salsa fue la encargada de poner el sello a los Premios Soberano con la figura de Oscar De León, el dominicano José Alberto «El Canario» y la revelación del año, la orquesta «Chiquito Team Band».

Entre los premios más esperados destacaron, grupo bachatero y bachata del año, ambos recogidos por Raulín Rodríguez por su éxito: «Esta noche». Miriam Cruz hizo lo propio como agrupación merenguera y con el merengue del año por «Esa loca».

La película «¿Quién manda?» fue premiada como la mejor, y sus protagonistas, Frank Perozo y Nasha Bogaert, ganaron como actor y actriz del año.EFE