Santiago.- El Primer Tribunal Colegiado de Santiago condenó este martes a 30, 20 y 10 años de prisión a los implicados en el atentado contra el abogado y comunicador Jordi Veras.
Los jueces Annneli Torres, José de Jesús de Asis Burgos y Sergio Furcal, además impusieron al pago de 100 millones de pesos como indemnización por daños y al pago de las costas.
En el caso de Candy Caminero fue condenado a 30 años de prisión. Mientras que impusieron 20 para Adriano Rafael Román Román (autor intectual), Engels Carela Castro, Franklin Reynoso Moronta, Roberto Zabala Espinoza, Arturo José Ferrera del Castillo y 10 para Franklin Reynoso.
Tras la lectura de la sentencia, Veras manifestó que luego de cuatro años y 16 días hoy recibieron lo que estaban esperando. Dijo sentirse conforme.
“Había dicho que la lucha ha sido fuerte, ha sido ardua pero mayor fue el apoyo solidaridad y el cariño. Yo pienso que cuando tú tienes eso nada es imposible, la sociedad dominicana ha sido la mejor resarcida con este asunto, porque necesitaba un mensaje, hemos estado golpeado por el sicariato y por la delincuencia”, manifestó.
Dedicó la sentencia a cada una de las familias y víctimas de la delincuencia. Llamó a la sociedad a no perder la fe y la esperanza.
“El mensaje que ha mandado el tribunal desde Santiago en el día de hoy es diciéndole a los dominicanos y dominicanas mejoras en este país, sí se puede, si se podemos hacer algo mejor de lo que tenemos y eso es una señal”, manifestó Veras.
Los disparos contra Veras no solo le afectó la visión y pérdida de un ojo, sino que vio reducir su capacidad física.
Aunque el atentado se produjo el día 2 de junio de 2010 cuando llegaban a las instalaciones del canal 25, las medidas de coerción contra los siete imputados se produjeron el día 17 de noviembre, informa el caribe, en su portal.
Durante la audiencia preliminar y el fondo del proceso, se produjeron 34 aplazamientos y cinco suspensiones.
Que bueno por fin ese delicuescentes. Solo en sto dg.seve ese sirco
Se ha hecho justicia !!!!!
Sólo espero que ahora no comiencen con los trucos de que por razones humanitarias hay que darle libertad condicional a ese monstruo, ese demonio tiene que morir en la cárcel, pero no en Rafey donde tiene todas las comodidades, que lo manden al 15 de Azua
Cuando muera, espero que sea de un cáncer con metástasis.
Debe sufrir una muerte lenta y dolorosa, pero ahí adentro guardado.
Debieron darle 30 a cada uno y 100 al Roman ese, que mas bien parece el hijo del diablo, susantisima que hombre mas malo.