El municipio de Constanza se tiró a las calles, reclamando que se detenga la deforestación de sus lomas, cientos de personas se sumaron a la lucha que busca proteger los bosques localizados en la Cordillera Central de la República Dominicana.

Constanza



Este fue el documento leído durante la manifestación pacifica.

Dios nuestro creador, hizo de este mundo una casa para habitarla y convivir en ella, nunca para destruirla. Lamentablemente en la actualidad hay más deseo en destruir nuestro hábitat que en construir y desarrollar una vida sustentable.



El municipio de Constanza está siendo víctima de los mayores daños ecológicos del país. Las manos criminales están descargando sus indolentes e imperdonables acciones de tala indiscriminada a gran escala, afectando en los últimos años el 33 % de una de sus principales especies el pino occidental, una variedad que tarda cerca de 20 años para alcanzar un tamaño regular.

Para recordar lo que muchos en un momento de su vida estudiantil hicieron, fue reforestar varias zonas de este municipio y hoy son devastadas inclementemente.

La excusa de siempre para acabar con la vida de los bosques y agotar nuestros ríos, son los famosos planes de manejo, los cuales se ejecutan de manera irregular de acuerdo a lo que estipulan los artículos 33 y 36 de la ley medioambiental 64-00, donde se establece el carácter participativo de las comunidades y organizaciones en el proceso de elaboración y ejecución de plan. En este sentido la gran interrogante es la siguiente: ¿En qué momento se ha desarrollado un plan de manejo con la participación de las comunidades y organizaciones?.

Lucha

La depredación también afecta a los ríos, la extracción de arena también crea una alarma en todo el pueblo, el clima se hace insoportable y la vida misma desmejora a un ritmo acelerado.

Constanza, es cuna del nacimiento de los principales ríos, más del 85 % de la nación, la principal zona boscosa del país considerada por la UNESCO pulmón del caribe. Además el escenario soñado de cientos y miles de turistas, los cuales ante esta acción criminal, sacarían de su agenda a este municipio como su lugar favorito para vacacionar.

Este el pueblo y el país no pueden permitir que nadie destruya lo que a todos nos pertenece y de ser así, las futuras generaciones vivirán en un árido, inhóspito y terrible desierto.

Nos apena que el presidente de la República rehúse referirse al tema de Loma Miranda y que adoptara un comportamiento esquivo e indiferente con la prensa de este municipio sobre este urgente tema de tala indiscriminada de nuestros bosques, aun cuando su aspiración es traer 10 millones de turistas en 4 años. Señor Presidente, traerá turistas a una zona devastada y de ríos que agonizan por su omisión?.

Requerimos resultados y pedimos la destitución del negligente, incapaz e inoperante ministro de medio ambiente, quien en su condición de médico no ha podido demostrar capacidad al frente de ese ministerio y ni siquiera ha visitado este municipio para verificar las denuncias y los daños causados aun cuando tenemos la mayor importancia ecológica del país. Además de que se regule cualquier tipo de corte.

Esta marcha es pacífica para hacer un llamado a la conciencia nacional y de no haber resultados positivos, los 5 y 10 camiones que salen cargados de pinos diariamente, serán retenidos por la población hasta que nos preste atención.

Hoy se ha levantado un pueblo pacífico cansado de los atropellos y abusos y lo harán en algún momento contra Coraavega y Edenorte, instituciones que han limitado el desarrollo de este productivo valle.

Somos el pueblo de mayor producción de la República Dominicana y con los daños medioambientales y disminución del agua, caería en decadencia y luego en un futuro muy incierto.

El planeta no necesita que el hombre lo salve, lo que necesita es que el hombre no lo destruya.
Despertad Constanza,
Basta Ya!!!