Washington, DC. “La epidemia de ébola en África es un problema serio de salud pública, pero que todavía puede ser controlado si se aplican las medidas preventivas”, afirmó el doctor Luís Gomes Sambo, Director regional de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para África, donde dirige los esfuerzos de cooperación técnica para 47 Estados Miembros.

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Desde que se registró el primer caso en Guinea en marzo de este año, el virus se extendió a Sierra Leona y Liberia, contabilizando al 1 de agosto de 2014 1369 casos y 759 muertes. Estos tres países nunca antes habían visto casos de esta enfermedad altamente infecciosa y letal que se transmite por contacto directo con la sangre, fluidos corporales y tejidos de animales o personas infectadas.

Gomes Sambo ha estado al frente de la respuesta regional de la OMS, movilizando expertos y recursos, así como convocando a reuniones de emergencia de los ministerios de Salud para discutir la situación y elaborar estrategias regionales y nacionales para hacer frente a la epidemia, la más grande que ha afectado a África hasta el momento.



La Organización Panamericana de la Salud (OPS), oficina regional de la OMS para las Américas, lo entrevistó durante su reciente visita a Washington DC donde participó de la Cumbre de Líderes Africanos.

¿Cuán compleja es la epidemia de ébola en África?

Esta epidemia es un problema serio de salud pública y estamos preocupados de que pueda extenderse a otras áreas o territorios, pero creemos que la situación todavía es controlable si aplicamos las medidas preventivas necesarias. Además, ha habido un número inusual de trabajadores de la salud afectados (123 infectados, 70 fallecidos hasta el 1 de agosto), lo cual aumenta la complejidad para luchar contra la epidemia. Y, por otro lado, hay resistencia significativa en la comunidad para adoptar medidas preventivas, principalmente a causa de creencias tradicionales y rituales relacionados, entre otras cosas, con el entierro de los fallecidos.

¿En qué consiste la estrategia para controlar la enfermedad?

La transmisión se da de persona a persona, en las comunidades, y también en los centros de salud. La intervención consiste en proveer información a la población para que tome las medidas protectoras para evitar el contagio y romper la cadena de transmisión. Es también importante rastrear a las personas que tuvieron contacto con alguien infectado para prevenir la posterior diseminación de la enfermedad. A nivel de los centros de salud es importante entrenar al personal sanitario en medidas para el control de infecciones y proveerlos con las herramientas y el equipo protector para evitar infecciones.

Según la última información sobre la situación del ébola, ¿cuál es la potencial duración de esta epidemia?

Es muy difícil de predecir. El periodo de incubación del virus es de 2 a 21 días. Teniendo en cuenta esto, y para que la OMS declare el fin de la epidemia debe haber cero notificaciones de casos durante 42 días.

¿Es esta epidemia una amenaza para otros países del mundo?

Se trata de una enfermedad provocada por un virus, que es altamente infecciosa y cuyo riesgo o amenaza para otra parte del mundo está allí. De hecho otro país, Nigeria, se ha visto afectado con un caso de una persona infectada que viajó desde Liberia. Esto es un ejemplo de que el riesgo de amenaza existe pero hay medidas para contenerlo en los tres países actualmente afectados y necesitamos hacer uso de ellas en el momento y el lugar adecuados.

¿Cuáles son las recomendaciones para prevenir el ébola que otros países pueden tomar?

La OMS no está recomendando actualmente ninguna restricción a viajes, cierre de fronteras o cuarentena. Ello dependerá de cómo evolucione la epidemia. La próxima semana (por el 6 y 7 de agosto) estamos teniendo una reunión del Comité de Emergencia del Reglamento Sanitario Internacional sobre ébola. Este determinará si el ébola constituye o no una “emergencia de salud pública de interés internacional” y la OMS podría hacer recomendaciones especiales sobre medidas que podría tomar los países para reducir o prevenir la propagación de la enfermedad.

Algunos países, como los Estados Unidos, ya han hecho recomendaciones a viajeros para que minimicen sus viajes a los países afectados o han invertido en controlar la temperature de los pasajeros en los aeropuertos. Según el Reglamento Sanitario Internacional, los gobiernos pueden tomar las medidas que consideren necesarias para proteger a su población y territorios. La OMS está recomendando que se informe a las personas sobre la existencia de esta enfermedad y la epidemia, sobre las formas de prevenirla y protegerse, y que los gobiernos en los países afectados minimicen las actividades que pueden congregar a gran cantidad de personas, lo que podría aumentar el riesgo de proliferación de la enfermedad.

¿Qué puede hacer la comunidad internacional para ayudar?

La seriedad de la situación llama a una acción de emergencia a todos los socios. La comunidad internacional puede aportar asistencia valiosa. Los tres países afectados tienen sistemas de salud muy débiles, capacidades al nivel local también débiles, y es ahí donde debemos fortalecer la entrega de servicios sanitarios, de información, prevención y medidas de protección. También por la necesidad de más capacidades de tecnologías en términos de laboratorio, tratamiento y logística, que no están disponibles tampoco en una situación normal.

¿Cuáles son las necesidades más urgentes en los países afectados?

He visitado los tres países afectados y las necesidades se concentran en más personal de salud para trabajar en el manejo de casos en los centros de tratamiento, porque prácticamente solo una organización internacional, Médicos sin Fronteras, está involucrada fuertemente en esto. La cantidad de centros de tratamiento tampoco alcanza para cubrir las demandas actuales. También necesitamos fortalecer las capacidades de laboratorio, en especial en Liberia y Sierra Leona, así como las de logística de los ministerios de Salud, con camiones, motocicletas y otros medios para transportar al personal, el equipamiento y las medicinas necesarias. Otra necesidad importante es la de proveer de la correcta información y en el idioma adecuado para comunicar a la población, abordar la resistencia y la negación de la existencia de infección, cambiar comportamientos para que las personas sigan las recomendaciones de protección que pueden salvarles la vida.

¿Qué rol puede jugar la comunidad para detener esta epidemia?

No podemos ganarle a esta epidemia sin el involucramiento activo de las comunidades, porque la transmisión ocurre en la mayoría de los casos en la comunidad, y son ellas quienes deben estar al tanto de la existencia de la enfermedad, de los riesgos de transmisión y de las medidas que pueden tomar para evitar el contagio. También deben estar confiados de que buscar atención a tiempo puede ayudarles a sobrevivir a la infección, la cual presenta una tasa de letalidad en esta epidemia de alrededor del 62%.

¿Cómo está la oficina regional de la OMS en África asistiendo a sus Estados Miembro en controlar el ébola?

Nuestra intervención responde a nuestro mandato y a nuestras funciones. En el contexto de una epidemia debemos ser más agresivos en cuanto a movilización de capacidades. Estamos redistribuyendo a nuestro personal para dar respuesta. También la Directora de la OMS, Margaret Chan, está movilizando recursos y proveyendo experiencia a los gobiernos y a otros socios. Hemos convocado a una reunión de emergencia con los ministerios de Salud para elaborar una estrategia regional de respuesta. Luego de ese encuentro, también los países han preparado sus propios planes para los próximos seis meses. Asimismo, estamos apoyando el entrenamiento de trabajadores de la salud para mejorar sus conocimientos en la lucha contra esta enfermedad que están viendo por primera vez y no tenían experiencia previa. También hemos creado un Centro de Coordinación Subregional de Respuesta al ébola, en Conakry, Guinea, involucrando a los socios como Médicos sin Fronteras y Unicef, para trabajar en forma coordinada y armonizada.

¿Cuáles son sus esperanzas con respecto al fin de esta epidemia?

Mis esperanzas están puestas en que veamos el fin de esta epidemia tan pronto como sea posible porque hay muchos desafíos de salud en África, y esta epidemia está desviando muchos recursos, entre ellos tiempo, que podrían utilizarse para prevenir otras enfermedades como la mortalidad materna y la infantil, entre otras.