Por Milton Olivo

Fue convertir de nuevo la República Dominicana en un país independiente, después de haber sido convertida en provincia de España por el dictador Gral. Pedro Santana.



Luperon

¿Cómo así? Que de una manera inconsulta o sin consultar al pueblo el presidente Santana negocio con la monarquía española convertir el país en una provincia de España, haciéndolo, es lo que se llama la anexión.



¿Y la Restauración? Fue la guerra que desataron bravos dominicanos contra los ejércitos españoles enviados a mantener la anexión, derrotándolos y restaurando la Republica en 1865.

¿Qué fuerza envió España a mantener la anexión? Treinta mil soldados veteranos de la guerra de Cuba, Filipinas y Puerto Rico. Dividido en escuadrones de Caballería, Infantería y Artillería.

¿En qué año fue la anexión? En 1861. ¿Cuándo inició la guerra? En 1863. ¿Y cuando termino? En 1865.

¿Cómo sucedió todo? Primeramente Sánchez que estaba deportado entro por Haití a pelear contra los españoles, fue cuando dijo: “Entro por Haití porque no puedo hacerlo por otra parte, pero si alguien pretende mancillar mi nombre, diré sin jactancia; soy la bandera dominicana”.

El 4 de julio de 1861, fueron fusilados en El Cercado, Francisco del Rosario Sánchez, Juan Erazo, Benigno del Castillo, Francisco (Cefiro) Martínez, José Antonio Figueroa, Juan Dragón, León García, Segundo Alcántara, José Corporán, Pedro Zorrilla, José de Jesús Paredes y Juan Gregorio Rincón, Rudecindo de León, Manuel Baldemora, Epifanio Jiménez, Romualdo (Tani) Montero, Domingo Piñeyro y Félix Mota.

Ese primer intento fracasó con el martirio de los patriotas. Luego hubo otro intento, y los responsables fueron fusilados en Santiago.

En 1863, los próceres restauradores Benito Monción, José Cabrera y Santiago Rodríguez, se reunieron en las montañas de Capotillo, para preparar el plan de restaurar la soberanía nacional, plan en el que simultáneamente trabajan millares de dominicanos en todo el territorio nacional entre ellos el más distinguidos de sus generales Gregorio Luperón.

Fue una guerra incruenta, donde hombres y mujeres fueron comprometiendo grupos decididos en cada provincia y sumándose a la lucha. Luego de dos años de guerra y la muerte de 18 mil españoles, estos decidieron rendirse y retirarse derrotados de la isla.

El autor es Escritor e Historiógrafo.