Un esposo fue a visitar a un sabio consejero y le dijo que ya no quería a su mujer y que pensaba separarse.
El sabio lo escuchó, lo miró a los ojos y solamente le dijo una palabra:
Ámala.
Y luego calló.
Pero es que ya no siento nada por ella, replicó el esposo.
Ámala, repuso el sabio.
Ante el desconcierto del hombre, el sabio agregó lo siguiente:
Amar es una decisión, no un sentimiento.
Amar es dedicación y entrega.
Amar es un verbo y el fruto de esa acción es el amor.
El amor es un ejercicio de jardinería: arranque lo que hace daño. Prepare el terreno, siembre, sea paciente, riegue y cuide. Esté preparado porque habrá plagas, sequías o excesos de lluvias.
Más no por eso abandone el jardín.
Ame a su pareja, es decir: acéptela, valórela, respétela, dele afecto y ternura, admírela y compréndala.
Y eso es todo: Dale tu amor y serás feliz.
BRAVO ALDO PEGUERO!ese consejo es aplicable y valido tanto para hombres como para mujeres…HOY EN DIA los divorcios estan a la orden del dia y las parejas por cualquier cosita me divorcio,o me busco otro/a
LA SOLUCION NO ES BUSCARSE OTRA/O LA SOLUCION ES EL ARREPENTIMIENTO
LEYERON HOMBRES?????? en ninguno de esos consejos hay que gastar un chele.
Bastante bien, Gracias…!
Excelente, Muy bien, Gracias…!
Excelente consejo!!