WELLINGTON. La jefa de la ONU para cambio climático, Christiana Figueres, advirtió este martes de que se acaba el tiempo para actuar contra el calentamiento global y se refirió a la peligrosa situación de las naciones situadas en zonas bajas de la costa pacífica.

Sandy en Nueva York



Figueres dijo en una conferencia de la ONU en Samoa sobre islas-Estado que el impacto del cambio climático era mayor en las naciones del Pacífico, a pesar de su escasa contribución en la creación del problema.

«El cambio climático es la mayor amenaza a la que se enfrentan estas islas, líderes de los esfuerzos mundiales para abordar esta cuestión», dijo a la AFP.



Figueres explicó que un nivel superior del mar no sólo erosiona la costa de las islas, sino que también arruina los suministros de agua al entrar en las aguas freáticas e inundar los terrenos de cultivo, haciéndolos estériles.

El calentamiento también hace que más ciclones y tormentas golpeen las islas. La representante de la ONU explicó que se prepara un plan que prevé el peor escenario, en el que refugiados por el cambio climático tendrían que ser reubicados en otros países.

«Son medidas extremas a las que estas islas tienen que prestar atención. Por supuesto tanto ellas como el resto del mundo quieren que las emigraciones de las islas se mantengan en un nivel mínimo».

Figueres dijo que la situación a la que se enfrentan estas islas-Estado hace más necesario avanzar en el objetivo de alcanzar un pacto para limitar los gases de efecto invernadero para finales de 2015.

La ONU quiere reducir el calentamiento global en 2ºC con respecto a los niveles anteriores a la Revolución Industrial, que según los científicos es el nivel mínimo para poder estabilizar el clima.

Figueres consideró que todavía es posible conseguirlo, pero que la puerta a esta opción «se cerrará pronto».

Los líderes de las islas alzan cada vez más la voz respecto a la inacción global.

El presidente de las Seychelles, James Michel, señaló en la conferencia de Samoa que los intereses de las grandes empresas han dominado el debate durante demasiado tiempo.

«Es hora de que reconozcamos el cambio climático como lo que es: un crimen colectivo de lesa humanidad», dijo, alegando que el cambio climático «le roba a las islas-nación su derecho a existir».

El presidente de las islas Marshall, Christopher Loek, dijo que las islas naciones tienen que lanzar un mensaje positivo sobre lo que se necesita hacer en la cumbre de la ONU de este mes en Nueva York, a la que seguirá otra en París en 2015 para intentar alcanzar un nuevo acuerdo climático.

«Debemos reconocer que no hay una forma de liderazgo más poderoso que el liderazgo a través del ejemplo», apuntó.