La base aérea estadounidense de Osan, en Corea del Sur, fue cerrada este lunes por informaciones acerca de la presencia de un tirador en un instituto situado en recinto, pero su director mencionó la posibilidad de una falsa alarma.

“Hemos recibido informaciones sobre un posible incidente que implicaría a un tirador”, dijo la 51ª escuadra de caza de las fuerzas aéreas estadounidenses, que está desplegada en esa base.



“Se dispuso un perímetro (de seguridad) y las fuerzas de seguridad patrullan la zona”, dijo el ejército en un comunicado publicado en su página oficial en Facebook.

La base aérea de Osan, a unos 100 km de Seúl, alberga a parte de los 28.500 militares estadounidenses desplegados en Corea del Sur.



En un comunicado, el director del instituto, Morgan Nugent, sugirió que el cierre de la base se pudo deber a un bulo telefónico.

“Uno de nuestros profesores recibió una llamada que parecía automatizada informándole de que se estaba realizando un ejercicio con fuego real”, dijo.

“Como no estaba previsto ningún ejercicio en el instituto, decidimos cerrar la escuela por precaución. Cuando recibamos autorización abriremos de nuevo las puertas”, añadió.

La 51ª escuadra declaró que toda la base aérea fue cerrada y añadió que no abrirá hasta que concluyan las operaciones de comprobación.

AFP