Una especialista de la Universidad del Pacífico entrega recomendaciones clave para trabajadores primerizos.

La búsqueda de empleo es una actividad estresante, pero cuando es la primera vez la ansiedad puede ser aún mayor debido a la inexperiencia. Para ello, existen algunos factores importantes de considerar para sortear de forma más exitosa este proceso.



Claudia Aliaga, Jefa de la Unidad de Empleabilidad de la U. del Pacífico, señala que, en primer lugar, el currículum vitae es una herramienta que ha debido adaptarse a los cambios en el mercado laboral y a los propios procesos de reclutamiento.

“Si bien es cierto existen muchos formatos disponibles, la tendencia nos indica que se requieren CV reducidos, enfocados a logros y con una clara definición de nuestras habilidades y preferencias profesionales, evitando recurrir a frases cliché que pueden servir a cualquiera y que no se relacionan de manera concreta y real con el postulante”, indica.



La especialista plantea además que, más que el formato, aquí lo importante es saber responder a 3 preguntas: ¿Quién soy? ¿Qué quiero? ¿Puedo? “Es importante conocer cuáles son nuestras fortalezas y por qué somos aptos para el perfil de cargo solicitado.

Los reclutadores reciben muchos CV y necesitan que sean concisos, claros, bien presentados y de fácil lectura. Si no pasamos esta etapa, por muy buen profesional y persona que seamos, podemos perder la oportunidad de la entrevista”, enfatiza.

Aliaga también recomienda complementar el CV con herramientas digitales tales como LinkedIn, portales laborales online y código QR que lleva a alguna página online personal, entre otros.

“Incluso hoy puedes utilizar un programa llamado Prezi, que te permite construir una presentación de tu CV al estilo story-telling o una galería de imágenes online para el caso de books digitales o de registro de actividades realizadas”, sugiere, y recuerda que no se debe olvidar que los empleadores revisan nuestras redes sociales.

También advierte que es bueno adecuar el CV dependiendo del contexto de la organización a la que se postula. “No siempre todo lo que he hecho es adecuado. Se debe poner aquello que nos ayude a potenciar el perfil requerido”, propone.

Ahora, plantea que en los casos en que no hay experiencia, las prácticas tempranas, los cursos y charlas realizadas, las actividades extraprogramáticas, la pertenencia a grupos o redes, son valoradas como experiencia.

La hora de las lucas

Claudia Aliaga plantea que el tema de sueldo es una de las “preguntas incómodas” dentro del proceso de la entrevista, especialmente si es nuestro primer trabajo. Por ello sugiere tener en cuenta algunos factores que ayuden a alcanzar las expectativas.

En primer lugar, sugiere conocer previamente las cifras relacionadas con el salario de ese cargo y/o carrera, ya que dar cifras erróneas (cifras muy altas o demasiado bajas) podría dar por concluido el proceso de reclutamiento.

“Muchas de las instituciones donde uno estudió realizan estudios de seguimiento de sus egresados y manejan cifras de los salarios.

También recomendamos entrar al sitio www.mifuturo.cl, donde están las cifras a nivel nacional, lo que nos permite contar con mayor información y saber cuáles son los rangos donde podremos negociar nuestras condiciones económicas”, recomienda.

Por otra parte, propone estar atento al momento de cuándo plantear el tema del sueldo en una entrevista de trabajo.

“Puede darse el caso que el empleador te pregunte cuánto es lo que quieres ganar o que te den la cifra. Suena bien si hablas de “condiciones económicas” más que de sueldo. Aquí es muy importante manejar bien las cifras del mercado y aprovechar la instancia para poder mover la cifra, ya sea en términos de dinero líquido u otras compensaciones, como más vacaciones, cursos de capacitación, seguros complementarios o viajes, entre otros.

Normalmente este tema se da al final de la entrevista, para que no impacientarse y estar preparado para el momento de la pregunta”.

En tercer lugar, señala que se debe tener presente que la negociación del sueldo no es el centro de la entrevista. “Incluso, si no te plantean este tema, puede ser mal visto que empieces tú preguntando por la cifra.

Más importante es hablar de las condiciones económicas a nivel neto, ya que con los descuentos de cotizaciones y otros la cifra líquida se va reduciendo. Aquí el concepto de los beneficios, el prestigio de la empresa, el tipo de contrato y las proyecciones del cargo, pasan a ser también elementos importantes dentro de la negociación”, advierte.

Por último, la experta de la Universidad del Pacífico dice que hay que tener claro cuál es el techo para negociar. “A veces la cifra final es menor a la que se esperaba, pero se pueden conversar alternativas que lo compensen, como poder estudiar y capacitarse, por ejemplo”, finaliza.

Fuente: BioBioChile