Santo Domingo. La reclusa Mary Peláez fue liberada ayer por un tribunal de la provincia San Cristóbal, tras permanecer en prisión por lavado de activos a favor del narcotráfico.

Peláez había cumplido poco más de cinco años de una condena de siete años por pertenecer a la red de narcotráfico del boricua José David Figueroa Agosto, también preso en Estados Unidos.



Para otorgar la libertad a la condenada, el juez Willy de Jesús Núñez alegó que ésta había cumplido con todos los requisitos para ello y citó entre ellos que se había preparado profesionalmente durante su permanencia en el penal.

Debe abstenerse de viajar, ir a bares y portar armas de fuego



Informa el periódico El Nuevo Diario que El juez que ordenó la libertad de Mary Peláez estableció una serie de condicionantes que incluyen la prohibición de visitar lugares de expendio de bebidas alcohólicas; así como tener un lugar fijo de residencia; impedimento de salida del país y acudir ante la fiscalía en cualquier momento que le sea requerido.

En el quinto considerando de la sentencia del juez de la Ejecución de la Pena señaló que ordena a la libertada Mary Elvira Peláez Frappier, el cumplimiento estricto y obligatorio de las medidas siguientes:

“Residir en la calle Primera número 24 del residencial Santo Domingo de Herrera; segundo, abstenerse de viajar al extranjero; tercero, abstenerse del abuso de bebidas alcohólicas y de frecuentar los lugares nocturnos de diversión como barras, discotecas; cuarto, dar cumplimiento continuo a sus actividades de derecho en el centro de Corrección de Najayo Mujeres; quinto abstenerse del porte ó tenencia de armas de fuego de cualquier naturaleza”.

Mary Peláez fue trasladada desde la cárcel Modelo de Najayo por un equipo élite de la Policía Nacional, y al salir de la audiencia, se observó sonriente, siempre mirando hacia abajo, con la finalidad de no tropezar con los talones de los agentes policiales que les custodiaban.

El juez de ejecución de la Pena del Distrito Judicial de esta provincia licenciado, Willy De Jesús, dispuso su libertad condicional el viernes temprano. Ella había solicitado solicitado su libertad en tres oportunidades, en dos de las cuales le fue negada por la oposición del ministerio público, quien argumentó que ella no había resarcido los daños provocados a la sociedad por los hechos cometidos.