Japón vive una crisis que amenaza su futuro, pero esta no es económica sino sexual. Sus ciudadanos cada vez desean menos tener sexo, lo que amenaza con empeorar la baja tasa de natalidad del país.

El último estudio realizado por la Asociación Japonesa de Planificación Familiar (JFPA) detalla que el 48,1% de los hombres y el 50,1% de las mujeres no mantuvieron relaciones sexuales en el último mes. Los datos muestran un incremento de cinco puntos respecto a 2012.

¿CUÁLES SON LOS MOTIVOS?
Los motivos de este creciente desinterés por el sexo están relacionados con diversos aspectos de la sociedad japonesa, en la que es difícil compaginar la vida personal y la laboral.

Uno de cada cinco hombres casados encuestados afirmaba estar “demasiado cansado” para practicar sexo después del trabajo, mientras que casi el 16% señalaba que se había vuelto sexualmente inactivo después de que su pareja diera a luz.

Entre las mujeres los motivos más habituales del desinterés por el sexo es que lo encuentran “aburrido” (el 23,8%) y que llegan de trabajar muy cansadas (17,8%).

La tendencia es especialmente llamativa entre los hombres de entre 25 y 29 años, de los cuales un 20% señala que el sexo “no le interesa”.

LA FORMA DE VIDA NIPONA
Los expertos apuntan a una larga lista de factores económicos, laborales o sociales que frenan a ambos sexos a la hora de embarcarse en relaciones sexuales o de iniciar vínculos amorosos.

Entre ellos citan la recesión económica, las largas jornadas laborales habituales en el país, el aumento del costo de vida o la presión social sobre los jóvenes – en especial las mujeres – para que se casen antes de cumplir la treintena.

CONSECUENCIAS
Todo ello compromete a la baja natalidad de Japón, actualmente del 1,4%, y la evolución demográfica de una de las poblaciones más envejecidas del mundo.

El Gobierno nipón ha puesto en marcha una estrategia para apoyar la maternidad, pero por el momento no ha planteado medidas para animar a los japoneses a hacer más el amor.

EFE