Rafael Correa

Rafael Correa

El presidente ecuatoriano Rafael Correa convocó este sábado a los gobiernos latinoamericanos a rechazar de forma unánime las sanciones impuestas por Estados Unidos a Venezuela, a las que consideró un intento de «desestabilización».

«Estemos o no estemos de acuerdo con el gobierno de (Nicolás) Maduro, por elemental dignidad, América Latina debe levantar su voz unánime rechazando tanta prepotencia, tanto unilateralismo, tanto imperialismo», dijo Correa en su programa semanal de radio y televisión.



Por lo pronto, los ministros de la Unión Suramericana de Naciones (Unasur) prevén, según Correa, dar «una respuesta regional ante esta nueva y grotesca injerencia de Estados unidos en un país soberano» como Venezuela.



El lunes, la Casa Blanca impuso nuevas sanciones a siete funcionarios del gobierno de Maduro amparado en un decreto presidencial -duramente criticado por países como Ecuador, Bolivia y Argentina- en el que califica la situación de Venezuela como una amenaza a la seguridad estadounidense.

Los responsables venezolanos son acusados por Washington de violaciones de derechos humanos durante las protestas antigubernamentales de hace un año que sacudieron a Venezuela y dejaron 43 muertos.

El gobierno de Maduro espera el apoyo de la Unasur en momentos en que enfrenta una dura crisis económica, y cuando en el país se ha elevado la tensión política por la detención de líderes opositores acusados de complotar contra el líder venezolano.

Duro crítico de la política exterior norteamericana, Correa consideró que el presidente Barack Obama se extralimitó y «por poco ya amenaza con sancionar a los votantes del gobierno de Maduro».

Estas sanciones, agregó el mandatario, son «para amedrentar a la gente, (para) que nadie acepte participar del gobierno (de Maduro), debilitarlo y desestabilizarlo».

«¡No lo vamos a permitir! Entienda que América Latina es otra, ya cambió, ya no somos patio trasero de nadie», sostuvo Correa. AFP