mayweather-pacquiaoHOUSTON, Texas (EFE) — El campeón invicto del boxeo, Floyd Mayweather, dijo que está dispuesto a darle la revancha a Manny Pacquiao, tras enterarse de que el filipino libró la llamada Pelea del siglo con una lesión en el hombro.

El lunes por la noche se confirmó que Pac-Man sufrió un grave desgarro en el manguito de los rotadores del hombro derecho previo a su encuentro con el boxeador estadounidense y deberá someterse a cirugía.



El médico Neal ElAttrache informó a la cadena ESPN de la lesión del deportista filipino, así como la necesidad de practicarle una operación. Mayweather dijo que aceptaría la revancha por el mismo medio.

ElAttrache examinó a Pacquiao el lunes en su clínica de Los Ángeles e informó que su regreso al cuadrilátero podría tardar entre nueve meses y un año. El púgil estadounidense dijo que cambiará sus planes de retiro, programados para septiembre, con el objetivo de esperar a su adversario.



«No tengo problema en volver a pelear con Pacquiao después de que se recupere de la operación», dijo Mayweather en un mensaje enviado a la cadena ESPN.

El boxeador estadounidense, que lleva una marca de 48 triunfos y ninguna derrota, dice que no busca superar la marca de Rocky Marciano, quien se mantuvo invicto en 49 combates.

La posible pelea deberá esperar hasta que Pacquiao se recupere de la operación y se resuelva el conflicto por el «engaño» manifiesto de parte de sus representantes a la Comisión Atlética de Nevada, al ocultar la condición del filipino.

Bob Bennet, director ejecutivo del organismo, indicó que Pac-Man no respondió el cuestionario oficial que se le presentó antes del pesaje del viernes, donde tenía que haber mencionado su lesión.

«No es solo el hecho de que no contestó la pregunta concreta de la lesión sino que tampoco fue honesto al no comunicar, desde que se lesionó, lo que sucedía», dijo. «No están obligados a hacerlo, pero tampoco es normal que dos horas antes de la pelea soliciten la autorización para que pueda recibir una inyección de analgésico. Eso nos pone en una posición muy precaria».

Pacquiao informó la noche del lunes que pretendía tomar toradol, un analgésico aprobado por la agencia antidopaje de Estados Unidos (USADA), pero que la Comisión no le dio el aval.

«No teníamos información médica, no hay imágenes de resonancia magnética, no hay documentos», explicó Travis Tygart, presidente de la USADA. «No fue un problema antidopaje. La verdadera pregunta es por qué su campamento señaló el ‘no’ en el apartado del cuestionario donde se hace la pregunta si existe algún tipo de lesión».

Tygart se deslindó de la situación diciendo que «nuestra organización no tienen ningún tipo de responsabilidad ante lo sucedido con el presunto ocultamiento de información, hicimos un trabajo perfecto en el control antidopaje». EFE