Santiago. El Gobierno inició los trabajos de construcción de las edificaciones que acogerán el sistema de emergencia 9-1-1, pero las motocicletas y algunos vehículos que trajo con antelación, ya presentan deterioro.A esto se suma, que una gran parte de los cuarteles están destartalados y requieren mejorar su infraestructura.

Motor



El 21 de agosto del pasado año, el jefe de la Policía Nacional, mayor general Manuel Castro Castillo, incorporó 50 nuevas unidades vehiculares y más de 30 motocicletas donadas por el gobierno de Taiwán. Sin embargo, ya algunos de los motores necesitan reparación y muchas veces deben ser remolcados por un compañero. “Lo que sucede es que los policías andan en los vehículos y no les dan mantenimiento y por eso se deterioran tan rápidamente”, refirió Elpidio Durán, residente en la zona sur, una de las comunidades con mayor queja de falta de patrullaje.

En deterioro



Aunque con las camionetas tienen mayor cuidado, también presentan cierto deterioro. A esto se suman las quejas de residentes en urbanizaciones y barriadas por la falta de patrullaje, lo que ha hecho que aumenten las denuncias de atracos y asaltos. Pese a que fue en enero de este año cuando por segunda ocasión el ministro de la Presidencia, Gustavo Montalvo, anunció que incorporarían a Santiago y Puerto Plata al 9-1-1, es ahora cuando empiezan los trabajos de las edificaciones.

Desde hace dos semanas, en los espacios donde funciona la Dirección Cibao Central de la Policía Nacional comenzó a ser cercado y se espera que para finales de este año o inicio del 2016 comience a funcionar el sistema en esta zona de la región Norte.

No obstante, se desconoce si existe un plan para mejorar los cuarteles, como el de la junta de los tres caminos, o el del barrio Yagüita de El Ejido a punto de colapsar.

Esperan bajen niveles de delincuencia

Ante la ola de violencia y criminalidad que han afectado a Santiago y a otros pueblos del Cibao Central, la población ha cifrado sus esperanzas en que se ponga a funcionar el 9-1-1 y otras acciones para que la paz y la tranquilidad vuelvan a ser parte de la familia, la que ahora se ve amenazada por los asaltos, atracos y asesinatos que a diario son reportados.

Fuente El Caribe