Santo Domingo. Unos 17.000 haitianos retornaron voluntariamente a su país desde República Dominicana, tras finalizar un proceso de regularización que dejó a miles de indocumentados en riesgo de ser deportados, informaron autoridades dominicanas.

«Hemos obtenido unos resultados de retorno voluntario de 17.456 personas en seis días», señaló el director general de Migración, Rubén Paulino, en declaraciones difundidas este viernes.



Paulino Sem

Agregó que de ese total, 858 inmigrantes regresaron en autobuses facilitados por el gobierno.



«Estaremos incentivando hasta el último momento la salida, el regreso voluntario de todos; tan pronto esa etapa se agote, entraremos al retorno no voluntario», dijo a su vez el ministro administrativo de la presidencia, José Ramón Peralta, en referencia a las deportaciones.

El pasado 17 de junio finalizó un proceso de regularización de indocumentados -en su gran mayoría haitianos-, en el cual las autoridades dominicanas recibieron 288.446 solicitudes de residencia.

Sin embargo, el plan dejó por fuera a 180.152 inmigrantes, indicó Luis Henry Molina, viceministro de la Presidencia.

El Movimiento Justicia Migratoria, formado por organizaciones que defienden los derechos de los inmigrantes haitianos y sus descendientes, estima que del programa quedaron marginados unos 200.000 de los 458.000 haitianos que se calcula que residen en Dominicana.

El plan de regularización, así como una ley de naturalización de hijos de extranjeros indocumentados forman parte de las respuestas del Estado a un fallo de septiembre de 2013, en el que el Tribunal Constitucional negó la nacionalidad dominicana a los descendientes de inmigrantes ilegales nacidos en el país vecino.

Según las autoridades, unas 55.000 personas presentaron solicitudes de naturalización.

«Se les está dando solución a través del reconocimiento de esa documentación y su consiguiente estatus de ciudadanía dominicana. Más de 12.000 personas han acudido ya a las oficinas de la Junta Central Electoral a recoger su documentación”, aseguró Molina.

La Dirección General de Migración (DGM) ha garantizado que «no habrá deportaciones masivas» y que cada caso será procesado individualmente.