Bien dice el refrán: «no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy». Sin embargo, a la mayoría en su momento nos ha pasado que dejamos para dentro de un mes y hasta para el año siguiente lo que pudimos hacer hoy. ¿Quién, ahorita a medio año, no ha cumplido la mitad de sus propósitos de fin de año? Muchos. A veces tienes en mente hacer algo y en medio de tus labores sale algo que no te permite llevar acabo eso y día con día posiblemente vas arrastrando pendientes. Quizás hasta no sea tanto lo que tienes que hacer en el día, tareas propias, como los pendientes que has acumulado hasta hoy. O te la pasas dando vuelta, hablando por la oficina con tus compañeros o por teléfono con tus amistades, o en el internet y cuando te das cuenta el día se ha ido y sientes que no has hecho nada.

fb depresion mujer pc



Bueno, pues eso se llama procrastinación. Otros le llaman «el ladrón del tiempo» o el famoso «mañana empiezo». Esto es el efecto de dejar de hacer lo que es realmente importante por hacer otras cosas que nos resultan más atractivas y que lo único que hacen es postergar nuestra tarea principal.

Y esto, de seguro, no es un tema nuevo para ti, porque según leí, 9 de cada 10 personas sufren este mal hábito.



Y como el ser humano siempre le echa la culpa a algo, pues sí, existen tres factores por los cuales solemos posponer nuestros objetivos, tareas, propósitos.

Según el Método Silva de Vida, existen 3 grandes razones del famoso «mañana empiezo», eso por lo que dejas para mañana lo que pudiste hacer hoy. Te las comparto, para que las conozcas y a partir de ahora queda en tus manos saber si sigues de la mano de un hábito tan poco saludable:

1. Por miedo.

¿No te pasó nunca que dejaste de hacer algo solo porque tenías miedo de no saber hacerlo, de no estar a la altura o de fracasar?

2. Por activación.

¿Has retrasado alguna vez una tarea, dejándola para después y después y después… hasta que no te quedó más tiempo para seguir posponiéndola y tuviste que terminar haciéndola de prisa y sin ganas?

3. Por indecisión.

¿Te ha pasado alguna vez que quieres hacer algo pero no sabes por dónde comenzar ni cómo hacerlo y al final te perdiste pensando en la mejor manera de hacer algo sin llegar a tomar la decisión para hacerlo?

Según el Método Silva de Vida, el famoso «mañana comienzo» tiene graves consecuencias. Veamos, cuáles son esas que, muy atinadamente ellos mencionan:

Causa estrés y ansiedad porque en el fondo sabemos que en algún momento vamos a tener que hacer esa tarea que evitamos.

Hace que malgastes tus energías concentrándolas en tareas poco o nada importantes que se alejan de lo que deberías hacer.

– Te separa de tus metas ya que la procrastinación está directamente relacionada con la «inacción» y por tanto eso hace que retrases las acciones que te acerquen a donde quieras.

– Altera tu estado de ánimo y tu humor recordándote constantemente eso que tienes que hacer y aportando más frustración y desgaste.

«Todos tenemos la capacidad de solucionarlo, lo que ocurre es que la gran mayoría de las veces confundimos la pereza, el agotamiento o la falta de motivación con la procrastinación…», comentan un blog del famoso método.

En tus manos está si sigues dejando todo para pasado mañana o hasta el próximo mes. Total, las consecuencias solo tú las vivirás. En ti está empezar a dejar ser parte de los 9 que todo lo que pudieron hacer ayer, antier y hace semanas, todavía lo cargan como pendiente.

Fuente: https://voces.huffingtonpost.com