Miguel Ángel Valerio, nombre de pila del intérprete de música urbana Don Miguelo, compareció ayer ante el distrito judicial de Cotuí, donde le fue impuesta medida de coerción en atención a la demanda que pesa en su contra por violación de propiedad interpuesta por el empresario Raúl Fernández.

La demanda por RD$8.5 millones fue sometida bajo el alegato de que el artista utilizó mobiliarios y penetró de manera desautorizada al ferry de la presa de Hatillo, en Cotuí, para rodar el video clip de la popular canción “Nota de Pasión”.



Don Miguelo

Don Miguelo dio respuesta a la acusación mediante su cuenta de instagram, allí explicó que prácticamente se trata de una extorsión por parte del querellante.



Esto fue lo que escribió:(Don Miguelo)

«Saludos a todos mis seguidores, quiero orientarlos acerca de ciertas cosas que pasan en mi madre patria. Para la realización del video «Nota de Pasión» contraté los servicios de la empresa «Luis Gómez Films», entre mis sugerencias le pido que se realice en paisajes naturales que den a conocer la belleza del país, también quería que en este video se resalte los valores de la familia dominicana y se engrandezca la figura de la mujer fuente de respeto e inspiración en mis composiciones.

Hasta ese punto todo iba bien, me presentan varios guiones, rechace vender la mujer como mercancía, me opongo y le dije eso no iba a ser parte este visual.

Ustedes sabes que lo mío es componer, hacer música, pago a otras personas que me asisten como es el caso de la empresa que contrate para realizar este video, la que me aseguró que tenía todos los permisos y lo acepte.

Pues hoy (Ayer) me citaron ante un juez acusándome de violar propiedad privada en la grabación del vídeo. Tremenda sorpresa para mí, pero yo respeto las leyes, me presenté al llamado del ministerio público, me han dictado medidas de coerción, lo grande del caso es que el productor del video antes de la vista de hoy se reunió con el querellante para buscar una salida diplomática, explicándole a este que los empleados de la locación le dieron el permiso para grabar algunas escenas, también se le explicó al querellante que nunca se usó «El Ferry» de su propiedad y la respuesta fue la siguiente: «»Yo lo que quiero es a Don Miguelo preso» y que si yo quería hablar con el debía pagar 5 millones de pesos.

Mi única responsabilidad en este caso es que pagué para que se me haga un trabajo, lo mío es llevar alegría y el sustento de mi familia, oren por mí, para que todo esto se aclare. Bendiciones. «