Santo Domingo. Las autoridades de Salud Pública anunciaron el sometimiento a la justicia, vía Procuraduría Especializada en Salud, de por lo menos dos de los centros hospitalarios que según una investigación, actuaron con negligencia y descuido con el paciente Claudio Caamaño Grullón, quien falleció por falta de atenciones médicas oportunas, luego de tener un accidente automovilístico.

El Ministerio de Salud Pública anunció, asimismo, que un tercer establecimiento de salud actuante en el referido caso, recibirá una amonestación pública.



Claudio Caamaño

Indica el periódico El Nuevo Diario que el informe oficial de la comisión técnica designada por Salud Pública establece algún tipo de responsabilidad por falta de atención adecuada u oportuna a dos de las clínicas donde fue llevado el héroe de la gesta constitucionalista, tras accidentarse en Baní.



Dicho informe, elaborado por médicos de las tres especialidades requeridas en el caso tratado, narra paso por paso todo lo sucedido, describe fallas en los procedimientos médicos, y finalmente, realiza recomendaciones para corregir serias deficiencias encontradas en el sistema de salud en la República Dominicana.

“El Ministerio de Salud está sometiendo ante la Procuraduría Especializada en Salud a los dos centros de salud que se vieron involucrados en la inobservancia de los servicios al paciente, mientras otro de ellos será objeto de una amonestación”, precisa un comunicado del MSP que aparece este jueves en los diarios de circulación nacional.

Una primera responsabilidad recae, según el informe, en la clínica a la que inicialmente fue llevado Caamaño Grullón, el Centro Médico Regional Aguasvivas, en Baní, donde no se le realizó un hemograma, ni ninguna otra analítica sanguínea, pruebas que por su nivel de atención el establecimiento estaba en condiciones de efectuar.

La comisión entiende que dicho centro incurrió en “insuficiencia de los procedimientos diagnósticos necesarios para establecer la condición del paciente y determinar la respuesta de su organismo al traslado”.

Destaca que previo a despacharlo, el Centro Médico Regional Aguasvivas no estableció contacto con ningún otro centro específico de salud para confirmar que el paciente fuera adecuadamente recibido.

“Tampoco se consignó el cuadro clínico o la atención otorgada en una nota de referimiento”, añade.

Con respecto a la participación de CEDIMAT, donde también fue llevado Claudio Caamaño, la pesquisa determinó que no hay evidencia escrita de que el paciente recibiera allí atención ni evaluación alguna, como alegó ese centro.

Cuestiona que la ambulancia que los trasladó hasta CEDIMAT, se mantuvo estacionada en el área de su emergencia por 40 minutos con el paciente dentro del vehículo, “sin que fuera institucionalmente evaluado”.

La noche del miércoles, CEDIMAT informó que en las próximas horas ofrecerá una declaración respondiendo el informe, para lo cual se encontraba reunido su Patronato.

En la Clínica Abreu, Caamaño Grullón fue evaluado y se le administró oxigenoterapia para mejorar la saturación de oxígeno, y tras ser llamado el cirujano general que lo atendería llegó en apenas 10 minutos, pero ya los familiares habían decidido llevárselo al centro médico UCE, donde finamente murió.

El informe critica que en la UCE no hubo una oportuna comunicación médico-paciente, censurando que los familiares no recibieron la información que les permitiera conocer la evolución del cuadro clínico de Caamaño Grullón, por lo que su fallecimiento fue percibido como algo inesperado.

A favor del centro médico UCE los investigadores dejan claro que los procedimientos médicos que el paciente recibió allí evidencian un manejo acorde con los estándares terapéuticos empleados en casos como el que se trata.

Destacan que en su historial clínico el paciente presentaba diversos antecedentes patológicos personales, y que los familiares lo llevaron a la UCE porque allí se encuentran los médicos que siempre lo han atendido e intervenido en procesos previos.

La comisión investigadora concluye en que Claudio Caamaño transcurrió por las etapas progresivas de un shock traumático y hemorrágico definido por las lesiones recibidas en el accidente y que el trauma de alta energía absorbido por su cuerpo fue suficiente para generar una respuesta generalizada con daño severo, cuyo pronóstico suele ser incierto, independientemente de cuán acertadas y oportunas sean las acciones terapéuticas tomadas.

“La concurrencia de diversos factores de riesgo y las graves lesiones producidas por el accidente redujeron cada vez más el nivel de salud de Claudio Caamaño, agotaron sus reservas y los mecanismos de regulación automática de las funciones vitales u homeostasis se tornaron ineficientes y, finalmente, no pudieron revertir la evolución de un cuadro de shock que lo condujo a una muerte lenta”, precisa el informe.

Finalmente, sugiere aplicar sanciones correctivas a los centros de salud que en violación a la Constitución y la Ley General de Salud no le proporcionaron la atención de emergencia adecuada, así como a los que incurrieron en fallos en la provisión de una atención integral y de calidad.

Concluye con una serie de recomendaciones dirigidas a corregir serias fallas y deficiencias que hay en el Sistema Nacional de Salud.

La pesquisa fue complementada con entrevistas a los familiares, a los médicos actuantes y a los gerentes de los establecimientos de salud. La Comisión analizó, además, el informe preliminar de la autopsia judicial realizada por el INACIF.