Santo Domingo, República Dominicana. De cada 100 asaltos o robos callejeros que se efectúan en el país, 80 se realizan desde motocicletas, práctica que en los últimos meses ha ido tomando auge, a tal extremo que la gente teme salir a las calles a cualquier hora del día.

Motorista



El dato surge de estudios internacionales a nivel de Latinoamérica, y a nivel local, de los reportes que periódicamente ofrece la Policía Nacional, con la agravante de que en República Dominicana 54% del total del parque vehicular registrado son motocicletas, aproximadamente unos dos millones, a parte de las existentes que no aparecen registradas.

El auge del uso de las motocicletas en América Latina para delinquir, en cuya escala República Dominicana ocupa los niveles más altos, ha llevado a que las naciones denominen la situación como “la peste que azota a los humanos en las calles”.



Indica el periodista Viviano De León que el problema empeora cuando las propias autoridades de la Dirección General de Impuestos revelan que en el país al 2014 existían cerca de 600 mil motocicletas que no contaban con ningún tipo de registro.

Resalta el periódico Listín Diario que esa falta de registro de un gran porcentaje de las motocicletas que circulan por las calles, entorpece las investigaciones que puedan hacer las autoridades para identificar a quienes las utilizan como medio de transporte para cometer robos, atracos y sicariato.

En una de las ediciones de su revista institucional “Moderna”, la DGII señala en un reportaje que “más allá de la muerte por la falta de regulaciones y la no observación de reglas de seguridad, se suma a la epidemia una peste, “el uso de las motocicletas para delinquir”.

Parque vehicular

Al 28 enero de este año, en el país existía un registro de 1,946,594 de motocicletas, posiblemente la mitad de las que realmente existen y circulan por las vías, debido a que la mayoría no están registradas, ni en Aduanas, pero mucho menos en la Dirección General de Impuestos Internos.

Las que no están registradas son ensambladas en el país con piezas que llegan a través de envíos y, por lo tanto, no cuentan con ningún tipo de regularización de parte de las autoridades.

En el año 2014, la propia Dirección General de Impuestos Internos (DGII) publicó en su revista institucional “Moderna”, que cerca de 600 mil motocicletas circulaban por las calles sin la debida regularización.