México. Los cadáveres de siete hombres decapitados fueron encontrados el jueves en un camino rural del sur del estado de Sinaloa (noroeste), bastión del capo recapturado Joaquín «El Chapo» Guzmán, informaron autoridades el viernes.

La muerte

Las víctimas, que tenían entre 22 y 49 años, fueron ultimadas a balazos antes del amanecer del jueves en la comunidad de Cacalotán, del municipio de Rosario, informó la secretaría de Seguridad Pública y la fiscalía de Sinaloa.

«Todos ellos se encontraban decapitados, acomodados en un camino de terracería poco transitado», dijo en rueda de prensa el subprocurador de Sinaloa, Martín Robles, al señalar que las víctimas no tenían antecedentes penales.

Los siete hombres, que se dedicaban a cortar madera en la zona en la que se presume actúan criminales, habían sido reportados como desaparecidos el 13 de junio por sus familiares luego de que salieron a trabajar, señaló Robles.

Explicó que el ataque pudo ser en respuesta a una incursión militar del 11 de junio en la zona o posiblemente los taladores ingresaron la zona de los criminales y «para infundir temor» les quitaron la vida.

Por otro lado, al menos unas 150 familias que habitan en pueblos del municipio de Badiraguato, en el que nació Guzmán, abandonaron sus hogares en días recientes por temor a ser víctimas del posible fuego cruzado entre grupos criminales, informaron autoridades.

Las familias viven en las comunidades de Arroyo Seco, La Palma y La Tuna, donde vive la madre del fundador del cartel de Sinaloa.

«Alrededor de 150 familias» de dichas comunidades enclavadas en la zona serrana abandonaron sus hogares «precisamente por el posible enfrentamiento que pudiera haber entre dos bandas rivales», dijo el alcalde de Badiraguato, Mario Valenzuela, sin precisar los nombres de esas organizaciones criminales.

Los pobladores desplazados dijeron a las autoridades que recibieron un mensaje de esos grupos rivales en el sentido de que «si había un enfrentamiento afectaría a civiles», dijo a la prensa el alcalde.

Sobre este caso, el subprocurador Robles rechazó de su lado que se hayan producido enfrentamientos, ataques a pobladores o asaltos en Badiraguato.

Robles reconoció sin embargo que tres hombres fueron asesinados en la zona, aunque dijo que no hay elementos para determinar si estén relacionados con las pugnas entre criminales.

Un retén militar ha sido instalado en Badiraguato, y elementos del Ejército realizan patrullajes.