San Juan, Puerto Rico. El amor, el afecto, la amistad y la lealtad son valores que “podrían manifestarse” en los insectos, al menos así se plantea en la historia de fantasía del espectáculo de Cirque Du Soleil, que se presentará este fin de semana en el Coliseo José Miguel Agrelot.

Ovo santo domingo



En medio de un impresionante “ecosistema” recreado en la arena del recinto, cincuenta artistas en escena personifican diversos insectos que logran embelesar al público con su energía, agilidad y movimientos magistrales, a través de increíbles actos que incluyen danzas en terreno y danzas aéreas, balanceos, acrobacias, trapecios y malabares, entre otros.

Todo esto enmarcado en un musical que combina elementos de bossa nova y la samba con el funk y la música electrónica, partitura creada por el brasilero Berna Ceppas.



Además, una muestra de sonidos reales de los insectos también se fusionan con la música de la orquesta en vivo.

La alegría entre los pequeños se deja sentir desde que se apagan todas las luces y visualizan los peculiares vestuarios y graciosos “animalitos”, especialmente los personajes principales (la mariquita, el extranjero extravagante y el master Flipo), que junto con los otros insectos, logran representar la diversidad y el esplendor de la naturaleza.

En la primera actuación, una libélula (dragonfly) se balancea con gracia sobre sus manos, manteniendo el equilibrio y control con su cabeza hacia abajo.

Luego, una mariposa realiza un acto de contorsión aérea, que deja a muchos asombrados. Asimismo, el próximo acto estuvo a cargo de una pareja de mariposas blancas que realizaron un sensual ballet aéreo.

Más adelante seis escarabajos tomaron control del escenario con otra actuación aérea.

Unas graciosas arañas también se deslizaron por la platea para cautivar la atención de los grillos, mientras una luciérnaga (Diabolo) se lucia con sus malabares.

Dos de los actos que más cautivaron al público fueron los acróbatas aéreos, y sin duda los saltamontes, que brincaban contra una gigantesca pared que cubría de esquina a esquina el escenario, actuación que cierra el fascinante espectáculo que gira por el mundo.

Aunque parezca una narrativa para los niños, ciertamente los adultos reconocen los sentimientos negativos que se abordan, como los celos y las diferencias por el amor de la mariquita.

La función del jueves, comenzó puntual a las 7:30 p. m., se extendió por dos horas y contó con un intermedio de 20 minutos que se ofreció a las 8:30 p. m.

Fuente: www.metro.pr/ Lynet Santiago Túa