Una mala alimentación puede ser fatal para nuestro cuerpo por muchas razones, pero también para nuestra piel y rostro.

captura-de-pantalla-2016-10-31-a-las-11-33-34Y es que hay una serie de alimentos que no son nada recomendables para el cuidado de nuestra dermis y pueden hacer daño a la cara.



Toma nota de ellos, y evítalos para conseguir un cutis fino y cuidado.

El acné aparece por problemas como un exceso de azúcar en sangre, una posible inflamación crónica y estrés oxidativo, además de por motivos hormonales.



Estas son las razones principales, pero lo cierto es que existen algunos alimentos que empeoran todas estas circunstancias.

1. Excederse con el azúcar

Abusar de la cantidad de azúcar que se consume tiene un impacto en el rostro, y es que el cuerpo avisa de los malos hábitos que a veces se practican.

Pues bien, esto se traduce en un tono blanco grisáceo en la piel. Observarás también una especie de adelgazamiento de la dermis, manchas pustulosas con dolor, mayor flaccidez en la zona inferior de los ojos, así como arrugas en la frente.

Asimismo, el azúcar reduce la elasticidad de la piel. Este síntoma es fruto, sobre todo, del exceso de productos procesados azucarados.

Una serie de alimentos que debes intentar evitar como sea puesto que, más allá de la piel, también son perjudiciales para tu cuerpo en general.

2. Abusar del gluten

Si tienes manchas en la zona de la barbilla con pigmentación más oscura y las mejillas rojas e hinchadas, y sueles consumir productos ricos en gluten, cuidado, tu cuerpo te está avisando.

Esta es la piel típica que delata un consumo excesivo de gluten.

Por ello, si te observas síntomas como pigmentación oscura o manchas alrededor de los órganos reproductivos, entonces debes valorar alejar el gluten de tu dieta, ya que quizá eres intolerante y no lo sabes.

Notarás grandes mejoras y la solución pasa por sustituirlo por mucha fibra y beber grandes cantidades de agua, de tal modo que recuperes el equilibrio de tu piel.

3. Intolerancia a la lactosa

La lactosa suele también generar intolerancias a un número elevado de personas.

Un buen modo de saber si realmente no te sientan bien los lácteos con lactosa es a través de tu propia piel y, por supuesto, de tu propio estómago.

Los síntomas en la cara que puede provocar una reacción a los lácteos son el hinchazón en la barbilla, pequeñas manchas blancas, círculos oscuros debajo de los ojos y los párpados hinchados.

Esto es algo bastante común, ya que con el transcurso del tiempo, muchas personas pierden su capacidad para digerir adecuadamente los alimentos lácteos.

La intolerancia a la lactosa se manifiesta, especialmente, en forma de granitos en la barbilla. Para lograr solucionarlo debes eliminar los lácteos de tu dieta durante unos veinte días.

Así podrás saber si era por esto y seguro que notarás tu piel mucho mejor, además de tener digestiones más livianas.

4. Alimentos muy grasos

Los alimentos que contienen un alto nivel de grasa también te generarán problemas en la piel. La grasa está directamente relacionada con los problemas de azúcar en sangre, ya que hace que aumente el nivel de grasa en la misma.

Esto hará que finalmente se acaben obstruyendo los poros.

Por si esto fuera poco, la grasa en la sangre impide el transporte adecuado de nutrientes y oxígeno, lo que se traduce en una piel menos brillante y sin vida. Hará que luzca mucho peor.

5. Café en su justa medida

No es recomendable tomar más de dos tazas de café al día, ya que la cafeína te hará liberar adrenalina, lo que, en exceso, puede acabar causando los síntomas del estrés y esto sí sería malo para la salud de tu piel.

Además, la cafeína no nos deja dormir bien, lo que hace que se anule la etapa de desintoxicación de la piel y que esta luzca sin brillo.

No obstante, cabe remarcar que estas recomendaciones no significan que se deban evitar por completo estos alimentos o sustancias, informó Mejor con salud.

Más bien hemos de consumirlos con cierta moderación, reemplazándolos por alimentos más saludables como las frutas, las verduras y los granos integrales, jugos, etc.

El cuerpo habla a través de la piel, no lo olvides.