El Circulo Juvenil de Prevención del Uso de Drogas, CIJUPD, destacó que el consumo de drogas y la delincuencia crece significativamente por la falta de políticas afectivas en los barrios marginados de República Dominicana.

El presidente de CIJUPD, Occesit Santiago Alfonseca, expresó que resulta inexplicable la forma en que las autoridades pretenden concienciar a la población, frente la lucha contra este flagelo que afecta de forma muy significativa a toda la nación, debido a la falta de inversión de recursos y aporte de materiales educativos por parte de la entidad gubernamental, ante la lucha contra este mal.



“La adicción al consumo de drogas en los barrios está llevando al país a situaciones extremas, las autoridades no apoyan a las organizaciones de los barrios y mucho menos se presentan en las comunidades con propuestas ni planes de trabajos eficaces, todo se queda en las universidades, eso está bien, lo aplaudimos, pero el verdadero problema está en los barrios, ahí es donde hay que esmerarse y realizar jornadas de prevención, en las escuelas, las organizaciones, clubes, juntas de vecino, etc., pero esto no parece estar entre los planes de las instituciones correspondientes.”, indicó.

En nota de prensa enviada a Ensegundos.net se indica que para esa organización es prioritario que el Consejo Nacional de Drogas CND, se involucre directamente en las comunidades con un programa de trabajo verdadero y eficaz, donde se eduque a los jóvenes de la realidad de las drogas, con el objetivo de acercar las comunidades e involucrar a los jóvenes a actividades alternativas, como la educación, recreación y deportivas, las que se pueden desarrollar conjuntamente con el, Ministerio de la Juventud, Ministerio de Deportesy la Policía Nacional.



Occesit Santiago Alfonseca, considera que para enfrentar la situación se requiere de la implementación de programas de atención a los jóvenes que por la falta de oportunidad se ven tentados a involucrarse en el mundo de las drogas, «es por ello que se hace inminente el apoyo a las instituciones que abordan tanto la prevención como la reeducación de los afectados por el flagelo”, afirmó.