Los restos del ex presidente Carlos Andrés Pérez, quien murió a fines de diciembre en la ciudad de Miami, no han podido recibir cristiana sepultura debido a un diferendo que mantienen las dos familias que él procreó, encabezadas por su esposa y su «querida».



El cuerpo del ex presidente está en una funeraria en Miami, en una especie de limbo, pues la custodia la tiene un tribunal.

Pérez, de 88 años, falleció la noche del 25 de diciembre de un infarto, acompañado de su «querida» Cecilia Matos y las dos hijas que procreó con ésta. Estas últimas planeaban sepultarlo en Miami pero Blanca Rodríguez de Pérez, quien afirma ser la única esposa del ex presidente, interpuso una demanda en un tribunal para evitarlo. Carlos Andrés, que fue dos veces presidente de Venezuela (1974-1979 y 1989-1993), tuvo seis hijos con ella.



En principio aceptaron

Cecilia Matos y sus dos hijas aceptaron el miércoles pasado la repatriación del cadáver para que sea sepultado en Venezuela tras una demanda civil interpuesta por Blanca Rodríguez de Pérez, en el Undécimo Tribunal de Circuito del condado de Miami-Dade.

«Repatriarlo es una manera de rendirle tributo, por lo tanto Cecilia Matos ni sus hijas van a convertirse en un obstáculo», aseguró entonces la familia Pérez Matos.

Con ese anuncio el juez encargado del caso, Gerald Hubbart, debería haber desestimado la demanda una vez que ambas partes presentaran en su tribunal constancia de lo acordado, según abogados, pero la acción legal sigue abierta en el tribunal.

Almomento.net informa que la familia Pérez Matos había manifestado su oposición a sepultar al ex mandatario en Venezuela argumentando que el ex presidente no quería ser enterrado en su país hasta que no cambiara el Gobierno de Hugo Chávez, quien intentó derrocarlo con un golpe de Estado en 1992.