Aaron Rodgers completó 24 de 39 pases para 304 yardas y tres touchdowns, y Nick Collins retornó una intercepción, para que los Green Bay Packers conquistaran el título del 45 Superbowl del football americano al derrotar 31-25 a los Pittsburgh Steelers.
En un abarrotado Cowboys Stadium de Dallas (Texas), Rodgers le ganó el duelo particular al mariscal de campo de los Steelers Ben Roethlisberger, para llevarse el galardón al Jugador M s Valioso de la final.
Los Packers, una franquicia de la pequeña ciudad de Wisconsin (noreste de Estados Unidos), ganaron su cuarto título de la Liga Nacional de Football Americano (NFL).
Green Bay no se clasificaba a un Supertazón desde 1998, y sus tres coronas anteriores las había ganado en 1997, 1968 y 1967.
Números del espectáculo
Se estima que año a año, los números de rating de la final del fútbol americano crecen un 300% y que, desde 1982, la final de esto que se ha vuelto el espectáculo deportivo más importante del mundo, es el programa más visto en el año en los Estados Unidos.
El año pasado, la final entre Santos de Nueva Orleans y Potros de Indianápolis fue vista por 106, 5 millones de espectadores promedio y un total de 153,4, convirtiéndose en el programa más visto en la historia de los Estados Unidos.
Todo comenzó en 1972, cuando en la final ganada por Dallas a Miami, se registraron más de 50 millones de televidentes, el primero en contar esa impactante cifra. Tales números, siempre en expansión, cuentan que en las últimas dos finales, no ha bajado de 90 millones de espectadores.
Esto hace que las ganancias crezcan en extremo: este año, mínimamente, hubo que contar con 2194 dólares, lo que cuesta la entrada más económica, aunque fue difícil encontrar esos tickets. El promedio del valor de los tickets rondó los u$s3678.
Vía Internet impacta un aviso de venta de un palco, por el cual se pidieron u$s254 mil, mientras que quien quisiera verlo por pantalla gigante debió pagar 340 dólares.
Aquellas personas acostumbradas a verlo por televisión, saben que aunque oficialmente el partido deba jugarse en 4 cuartos de 15 minutos, la final del Super Bowl se extiende a unas cuatro horas de duración, debido a la catarata de publicidades que lo invaden, y de eso sí que se saca provecho: este año, un anuncio que se extienda hasta los 30 segundos costará 3 millones de dólares.
Serán 200 los países que recibieron el envío televisivo de este año, lo que arrojó una posible audiencia de 300 millones de personas en todo el mundo, de las cuales 150 estarán en los Estados Unidos.
Aquel valiente que se acercó al estadio de los Cowboys de Dallas para ver la final entre Pittsburgh Steelers y Green Bay Packers, debió pagar 990 dólares para estacionar cerca del escenario del espectáculo, mientras que quien aparque a unas 20 cuadras, debió abonar u$s50.
Entre las celebridades que asistieron, se cuentan desde el presidente norteamericano, Barack Obama, hasta Christina Aguilera, la encargada de entonar el himno nacional, que le da paso al desarrollo del espectáculo.
Es tan grande el espiral de ganancias, que contar todos los números que hacen a la final del Super Bowl se vuelven meras estadísticas, aunque los 1000 millones de dólares que se espera como ganancia final, hablan de la locura y, sobre todo, la justifican, que un partido jugado por 22 hombres en cancha pueden generar.
Fuente:Infobae.com